La monarquía feudal inglesa

Siglo XI    

Introducción del feudalismo. Guillermo el conquistador. (1066).

Superpuso su feudalismo normando a las estructuras indígenas. Mediante el derecho de conquista adquirió un importante dominio patrimonial. Al ser responsable del reparto de feudos impedía grandes señoríos. El poder de Guillermo I queda reflejado en dos acontecimientos:

Domes Day Book (1085), manuscrito catastral que refleja el control real sobre el territorio.

En la asamblea de Salisbury exigió fidelidad a la monarquía a todos los señores (1086).

La doble herencia del rey (normanda e inglesa) será fuentes de problemas tras su muerte.

Siglo XII. Enrique II (1154-1189).

Enrique II

Unificó los territorios de sus herencias materna y paterna, junto con los de su mujer para crear un poderoso imperio. A causa de sus posesiones en Francia entrará en conflicto con los franceses. Fue considerado el artífice de la consolidación monárquica:

1.   Impuso el derecho romano.

2.   Reorganizó la Cámara de Cuentas y controló los ingresos fiscales de la corona.

3.   Se suprimieron las inmunidades de que disfrutaba la Iglesia.

Reacción nobiliaria: La carta Magna (1215).

Hay crecimiento del poder de la nobleza y de algunas ciudades (Londres). Política de cruzada del rey Ricardo Corazón de León. Luchas internas y pérdidas territoriales en Francia. Aumentó la influencia y los beneficios fiscales para la Iglesia Romana. Se recrudeció la presión fiscal debido al enfrentamiento con Francia.

     La Carta Magna.

El cobro de impuestos por parte real regulado por el Magnun Consilium.

Los barones sólo podían ser juzgados por sus pares.

Confirmación de los privilegios de Londres y de otras ciudades inglesas.

Libre circulación de mercancías por todo el reino.

Restablecimiento de los privilegios de la Iglesia y los barones.

Reinado de Enrique III (1216-1272).

Confirmó la Carta Magna, pero la derrota contra Francia provocaron la oposición nobiliaria. La petición de impuestos por parte del Papa para una expedición a Sicilia provocó una rebelión nobiliaria. Simon de Monfort obligó al rey a firmar las Provisiones de Oxford que sometían el poder al nobiliario. El rey anuló las Provisiones. Reacción nobiliaria; dictadura de Monfort.

Se produce la división entre los rebeldes y victoria final monárquica.

Enrique III aceptó la Carta Magna, pero anuló las otras decisiones.