Los jacobinos, como doctrina lo hace en consonancia con la dinámica de la guerra. Su objetivo es ganar la revolución. Buscan la salvación pública, la nación en armas, frente al enemigo exterior.
Son el patriotismo, basados en los ciudadanos que defienden la nación frente al enemigo. Es un patriotismo democrático, el derecho del pueblo a decidir su porvenir. Son unitarios, la patria es única e indivisible, son republicanos. La moral, la virtud y la política se identifican con ellos. Frente a los que no son patriotas, republicanos, que son amorales, etc. Los políticos tienen que ejercer esa moralidad, incluye a los especuladores, etc. Esa moral pública solo puede venir de la mano de políticos y medios morales, se concreta en la teoría del poder jacobino o salud pública. La opresión acaba con la amoralidad. Hay que suprimir esos derechos para tenerlos más adelante, sino se acaba con los enemigos de la República, no habrá República.
Los jacobinos van a tomar medidas más eficaces, una nueva Constitución, la del año II de la República. Es la principal aportación de los jacobinos. Lo más novedoso es la legislación, afecta a cuestiones económicas y sociales. Ellos dependen de los sectores populares. Su Constitución se basa en la anterior (1791), destaca el catálogo de derechos, es más amplio. Es democrático, insiste en la igualdad, se reconocen derechos sociales: al trabajo, a la educación y a la asistencia social.
El Gobierno revolucionario, quiere la fundación y defensa de la República. Sus medios son de un Gobierno dictatorial. Se redacta una carta de derechos para una nueva revolución. Para los teóricos jacobinos, prima lo colectivo a lo individual. Una violencia sistemática, ejercida por los comités. Hay que valorar la moralidad y la virtud.
Contamos con un documento, que es la Constitución del año II. Llegó a ser aprobada, pero se aplazó por la guerra. Nunca llegó a estar en vigor. La Constitución supone un avance, una parte dogmática, se elabora paralelamente. Un texto moderno.
La parte dogmática contiene la parte de los derechos. Son más amplios que en la anterior. Se caracteriza por el sufragio universal, la igualdad como principio rector, derecho de insurrección. Se habla de la felicidad común. Era poner sobre el papel, lo que ya se había llevado a la práctica. De ahí, a considerar la leyenda negra, de que los jacobinos eran comunistas, es un error. Es un régimen liberal. Aunque se plantea la expropiación.
Con respecto a los derechos, se reconocen derechos como el derecho al trabajo, asistencia social o a la educación.
En cuanto a los derechos políticos, salvo al sufragio universal o el de insurrección no hay novedad alguna.
Legislación paralela, la ley de máximo y mínimo (máximo, se establece un máximo para los precios y un mínimo para los salarios). Las requisas forzosas de acopios de alimentos.
No se nacionaliza la propiedad, el Estado interviene en crisis para regular la situación. Medidas para paliar la crisis de subsistencia.
Los otros decretos, son los decretos de Ventoso, son medidas que significan la abolición del feudalismo, pero sin compensación a los antiguos propietarios y un reparto entre los campesinos.
El jacobinismo se diferencia de los girondinos, en que ellos son partidarios de una política centralizadora. El federalismo que proponían los girondinos, lógico porque luchaban con la centralización del Antiguo Régimen.
Los jacobinos consideran que el centralismo es lo mejor, por las circunstancias. Están en un período de guerra. Ideológicamente también tiene sentido piensan que hay que garantizar la uniformidad de los ciudadanos. De ahí la importancia que le dan a la educación.
Otros grupos, que están más a la izquierda de los jacobinos, que los apoyaron. Estos grupos básicamente son dos o tres grupos, en estrecha relación con los grupos populares urbanos.
– Enrangès.
– Hertistas.
– Roux.
Son los que alientan a las masas populares. Nacen en el contexto de la crisis. Preconizan la violencia física en las calles, gozan amplio apoyo popular. Son la extrema izquierda de la montaña. Apoyaron las medidas de los jacobinos.
Son grupos urbanos, no tienen una doctrina coherente. Insisten en la igualdad y sobretodo tienen una reivindicación económica.
También lucharán contra la corrupción política. Estos grupos fluctúan, son muy difíciles de controlar.
Roux, es un sacerdote que alentaba con un discurso muy radical, criticaba el desabastecimiento, las penurias económicas, reclamaba la desaparición de los especuladores.
En sus discursos pedía la guillotina, para los oprimidores de los ciudadanos. Sus discursos no atacan a la propiedad privada. Esto llevó a una espiral de violencia en la calle. Los agitadores fueron detenidos y ejecutados. Los enrangès desaparecen.
Los hertistas, también se llaman los exaltados o cordeleros. Grupos muy radicales, tenían gran poder popular. Aquí si que hay componente ideológico. En su discurso hablan de la democracia directa, todo se resuelve en asambleas de barrio.
Había que ir a una Europa sin fronteras. El Gobierno basada en las comunas. Fueron personajes importantes, su discurso era radical. Se caracterizan por el culto a la razón, por encima de todo.
Los jacobinos no son anticristianos, son deístas, son contrarios a la influencia de la religión católica. Hablan de un dios supremo, pero ajeno a los asuntos terrenales.
Los hertistas son ateos, anticristianos. Sus manifestaciones se les atribuyen a ellos. Son similares a los jacobinos, critican la riqueza excesiva.