balonmano de base

         Para que cualquier deportista de base llegue a jugar en equipos grandes, no sólo sirve la altura, la coordinación o la potencia de lanzamiento, sino que lo principal es la motivación y las ganas de trabajar y conseguir sus metas y sus objetivos pero ello debe ser labor de TODOS y no sólo del entrenador. Un club debe de buscar al entrenador que considere más idónea y que sea capaz de transmitir a los deportistas además de conocimientos, filosofía del club, objetivos a cumplir,.. una gran motivación que haga al pequeño deportista acercarse a su deporte, tener un sentimiento de pertenencia a un grupo social con ideas de lograr un objetivo común, colaborar con los compañeros para lograr el éxito deportivo. Para un niño, su principal motivación es el JUEGO, se busca divertirse jugando y ello conlleva a tener un grupo humano alegre, distendido, que va  a gusto a sus entrenamientos porque el JUEGO es la base de todo aprendizaje deportivo puesto que es motivante y agradable para los niños. Una vez que se juega y se hace sentir a gusto a los deportistas deben de ir introduciéndose de forma paulatina los aspectos técnico-táctico específicos del deporte a practicar. Ello va a conllevar que el deportista comience a sentir placer no sólo por jugar sino también la ambición de competir y ganar, pero para ello todo lleva su tiempo puesto que la competición desde corta edad puede provocar que el niño con 15, 16 años se canse de esa competición y esa tensión de semana tras semana y día tras día.  Con motivación, juego como aspecto motivante, constancia, mimo, trabajo y sobretodo VOLUNTAD, nuestros pequeños conseguirán adquirir poco a poco un sentimiento de ganas de evolucionar, de progresar y sobretodo de competir para llegar a ser el mejor, pero ello conlleva cierto sacrificio y trabajo.

         La base, ver a un niño sonreir mientras corre, salta, lanza,.. en definitiva VERLO DISFRUTAR es muy gratificante para cualquier entrenador porque ese niño está educándose dentro de la enseñanza deportivo, esta compartiendo sus momentos alegres con un grupo de personas, se está socializando y busca unos objetivos a corto, medio y largo plazo. Queramos o no, la base es el futuro de los grandes equipos del mañana porque tiempos de vacas flacas llegan y si no se mima, se cuida y se trabaja la base, los grandes equipos durarán mientras haya dinero pero hay que recordar que “todo gran deportista es grande porque ha tenido una buena base”