El renacimiento es una época de grandes cambios. Estos se observan en muchos ámbitos. Centrándonos en el económico hay que decir que aunque el renacimiento sigue basando la mayor parte del peso de su economía en el sector primario, al igual que en la época anterior, asistimos a un poderoso impulso de la misma gracias a las nuevos avances industriales que favorecerán tanto la industria textil, como la minera, como el comercio.
Estos cambios serán posibles gracias a una revolución tanto en pensamiento como en equipamiento. Esta será una época de grandes descubrimientos y de inventos revolucionarios que cambiaran el mundo, ampliándolo y trastocando las bases del mundo conocido hasta el momento.
El descubrimiento de América y la inundación de los metales preciosos americanos en el mercado europeo permitieron el florecimiento del comercio a niveles desconocidos en los siglos anteriores. Además, inventos como la imprenta de Gutemberg permitieron que las nuevas ideas renacentistas calaran profundamente y con velocidad en el panorama europeo.
Así pues, podríamos decir que uno de los aspectos más importantes del renacimiento fue la nueva orientación a las ciencias con tendencias al estudio de la naturaleza, base del progreso científico del momento.
Para que se diera ese renacer en la cultura y en la ciencia, fue necesaria la modificación de la economía de los países europeos; mientras que en la Edad Media estaba basada en la propiedad de la tierra, en la época moderna se basó en el comercio del dinero. Podemos hablar del renacimiento como una época a caballo entre estas dos etapas en la cual, poco a poco grandes familias burguesas (como los Medichi de Florencia) irán alcanzando nuevas cotas de poder gracias al comercio de dinero apareciendo los primeros bancos en las ciudades italianas al principio y extendiéndose más adelante por el norte de Europa y los principales centros urbanos.
Para terminar, La desaparición de las grandes pestes medievales, el auge de la vida urbana y ciertas mejoras en la forma de vida ocasionaron un crecimiento demográfico evidente en casi toda la Europa occidental, marcado por una fuerte tasa de natalidad y un descenso de la mortalidad infantil. Las principales zonas de poblamiento eran el norte de Italia, los Países Bajos y el centro de Francia.
La época del Renacimiento significó también un cambio para el mundo de los bancos, en la medida en que tras haber una baja evolución en cuanto a este tema se retoman en Italia del norte, ciertos procesos bancarios y se crean unos nuevos, como las letras de cambio que le permitían al viajero depositar su dinero en un lugar para viajar a otro y poder retirarlo desde allí, lo que facilitaba mucho el comercio. Hay que decir, que familias enteras se dedicaron al negocio formando bancos de gran respeto y con una gran capacidad de manejo de estas entidades muy avanzadas.
Este periodo fue el inicio de las actividades comerciales, cuyos pilares de la economía fueron:
. Productos traídos de Oriente.
. La industria textil con proporciones y métodos de fabricación dignos de una industria moderna, además de las armas.
La lana rústicamente elaborada era adquirida en países ricos en producción ovina. Era llevada a Italia donde se la reteñía y refinaba, revendida a un costo mayor al adquirido, pero ya llevaban una marca.
En Florencia floreció el comercio de la lana, mientras que en Milán prosperaban fábricas de armas y armaduras.
El intenso comercio permitió a las arcas del ducado milanés obtener grandes ingresos.
En el lenguaje bancario era común utilizar vocablos como: banco, débito, caja, cuenta, cuenta corriente, descuento neto y otros. Términos creados y difundidos por los bancarios.
El centro de la finanza fue la ciudad de Florencia, con más de cien compañías bancarias, sociedades familiares enriquecidas a través del comercio; decenas de filiales y centenares de agentes.
Facilitaban pagos y cambios de dinero, instituyeron cuentas corrientes, operaciones de giro y pagos a distancia por medio de cheques. Así mercaderes viajaban sin llevar dinero, evitando el peligro de ser robados. Exhibiendo una simple hoja de papel, retiraban dinero en la filial de la banca, que luego era descontado de sus depósitos.
Lo espectacular de las actividades fueron los préstamos. Prestaron dinero a reyes para mantener a los ejércitos.
Actividades
1. Establece
. Un paralelismo entre las actividades bancarias del siglo XV y las actuales.
. La importancia de la banca en la microempresa.
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