Hace ya varios días que las falsimedias y otras corrientes del círculo de los mentideros políticos, vienen barajando las quinielas de posiciones ministeriales. Evidentemente, el ministerio que más me afecta y preocupa es el de Asuntos Celestiales, como dice un compañero del Foro de Vida Independiente.
Pues bien, aun no creyendo en santos, llevo días rezando a todos cuantos conozco por referencias de mi pobre abuela, ya desaparecida, y esa si que fue una santa. Anónima, pero santa en definitiva.
Dícese, al menos por lo poco que al respecto he leído, porque no quiero dejarme contagiar demasiado por las microbacterias mediáticas y sociales de la metodología de lo que se debe de creer que por lo visto, Don Jesús de las Calderas, solicita ser ministro de Momento. Perdón, quise decir de Fomento, sin determinar momento y que para ministrables de asuntos sociales, nos quedaba la nueva reina mediatica, por haber conseguido ser profeta en su tierra, Doña Carme Chacón, junto con la madre de los desamparados y anterior secretaria de Estado de los Asuntos Sociales Doña Amparo Valcarce, amiga de un Zapatero, que la adora fervientemente.
Pues bien, parece ser que Doña Carme Chacón salvadora de naufrágios y futura madre de España, futura también perceptora por derecho del cheché bebe, que dará para sumar unos cuantos peluches a la criatura más los que de boina reciba de más de un cacique interesado o cuanto menos pretendido, no quiere asumir tal cargo.
Con lo que la apuesta parece quedar despejada con la madre de los desamparados, de la que ya no me atrevo a decir más que eso de que: los santos nos acompañen y nos pillen confesados.