¡Menos Samba y más traballar!
José María no puede realizar ninguna actividad sin ayuda, pero no ha obtenido el máximo nivel de dependencia.
MATUCHA GARCÍA. MÁLAGA
El sordociego que no obtuvo el máximo nivel de dependencia en su valoración recurrió ayer el dictamen de la Junta. El joven y la madre de éste se reunieron ayer también con representantes de la Junta de Andalucía, administración que se comprometió a revisar la puntuación otorgada a este dependiente, según dijo la madre. Dolores no ceja en su empeño. Su objetivo es que su hijo alcance el máximo nivel de dependencia posible para que así goce de mayor calidad de vida y recursos cuando ella no esté. Además, batalla por lo que considera una injusticia. Y es que José María, su hijo, es sordociego. Necesita estar acompañado en todo momento para realizar cualquier actividad. A sus 28 años observa con incredulidad y resignación cómo la Ley de Dependencia no responde hasta el momento a sus expectativas.
El joven ha obtenido 89 puntos, a un punto de la clasificación máxima. Dentro de este grado tres, el de la gran dependencia, se establece el nivel uno (de 75 a 89 puntos) y el nivel 2 (de 90 a 100). Los recursos y el dinero a los que puede optar aumenta a mayor clasificación.
Dolores Lozano se mostró ayer satisfecha por la atención del Gobierno regional y esperó que la nueva valoración otorgue a su hijo la calificación esperada. Acerca del estado anímico de José María dijo que también está contento, aunque comentó que a él le cuenta la verdad a medias para que no se venga abajo.
Dolores explicó que desde la Junta de Andalucía le trasladaron que no por acudir a los medios de comunicación van a obtener ningún privilegio y confía en que el malestar existente en esta administración no le suponga ningún perjuicio.
Dolores exige para su hijo lo que ya es un derecho por ley. Actualmente subsisten con algo menos de 500 euros, que es la pensión que él recibe, ya que su madre atiende a José María en todo momento, por lo que no puede trabajar. Además de que su hijo goce de mayores prestaciones, una de las grandes preocupaciones de Dolores es garantizarle a su hijo su bienestar cuando ésta no esté. “Ahora me tiene a mí, pero yo no voy a estar siempre. Ahora mismo el único apoyo que tiene soy yo”, reseña.
Comentario de J.A. en FVI:
¿ Privilegios?
Despues de mas de un año de entrada en vigor de la Ley?
Despues de su dejadez y negligencia para hacer un valoración que es evidente?
Anda ya…
No queremos privilegios pero va a ser hora de empezar a pedir responsabilidades a todos estos politcastros de tres al cuarto que se ponen dignos ateniendose al cumplimientos de leyes y encima se permiten el lujo de juzgarnos como buscadores de privilegios cual “picaros” modernos.
El balance de una año de LePra: Falta de voluntad politica… demoras irremediables (si no que se lo pregunten a los solicitantes fallecidos y sus familias) (y a los vivos desatendidos) …. valoraciones negligentes. .. desproteccion juridica y judicial…
Y no me jodan mas con que les ha sorprendido la puesta en marcha de la Lepra y la avalancha de solicitudes. .. Despues de un año no se puede hablar de sorpresa (yo creia que los politicos estaban para preveer todas esas cosas, maxime cuando son los artifices de una ley que llevan tiempo discutiendo) sino de negligencia para poner los medios necesarios.
¿Privilegios? … Y una mierda. DERECHOS
3 replies on “La Junta recibe al sordociego y le hará una nueva valoración”
Resulta sorprendente que miembros de la Junta de Andalucía pronuncien con lenguaje viperino la palabra privilegio. Vergüenza debiera darles esas demagógicas expresiones cuando se trata de un caso de negligencia el que ha motivado la protesta de una persona que no puede valerse por si misma y precisa de un asistente personal.
¿Acaso no es un vergonzoso privilegio que gente que no da un palo al agua, que únicamente actúan de comparsa de los adlátare, cobren unos emolumentos sobredimensionados por obra y gracia del papá estado?
Estoy de acuerdo con J.A. cuando pide responsabilidades por todas las personas que han muerto sin recibir aquello que la Ley les otorga y que estos politicastros se lo han robado.
Dignidad es lo que les falta, dignidad y algunas otras cosas.
Así es Teuladí. De la A a la Z con tu opinión y la de J.A me manifiesto.
Me asombra este país y sus habituales hipocresías, contra las que bien poco podemos hacer quienes las percibimos y en lugar de callarnos las denunciamos, porque siempre hay cortinas corredoras que por unas u otras razones, apoyándose en distintos argumentos todo lo tapan.
Una de las cosas que más me asombra de esta Ley es, además de su negligencia y mal hacer es esa prisa que todas las comunidades se han dado en decir que van a indemnizar a los muertos con sus prestaciones retroactivas, cuando hablamos de una ley que es para vivos y que lo necesitan en el momento que lo necesitan.
¿De qué le sirve a un muerto que le reintegren el importe de un servicio que no le llegó a tiempo ni para mejorar, ni incluso para salvar su vida?
¿Por qué nadie se asusta ante semejante crudeza y barbaridad?
¿No es posible que en lo que pagan ahora a muertos obstaculicen el valor de otras vidas?
¿A quien le importa esto?
¿Nos importa a nosotros mismos siquiera?
¿Les importa a los políticos?
¿Le importa a la sociedad?
¿Les importa a los familiares de los muertos?
¿Le importa a la justicia?
¿Por qué solo unos pocos molestos nos hacemos estas preguntas y nadie parece manifestarlas todavía?
Pues creo que tu misma te has contestado nada más comenzar, amiga mía.
«Me asombra este país y sus habituales hipocresías» …y a mí también, pero no me pilla de nuevas, esto es algo que me acompaña constantemente desde que tengo uso de razón.
La sociedad plena acoge este signo de bajeza, quizás por que antes se la fomentarón los políticos y los discípulos antecesores a Rouco Varela.
Y respecto a tu cita a las minorías, diré que «No está hecha la miel para la boca del asno»