El camino ha sido largo, mucho. Desde que comenzó la temporada de la Liga CADU todos y cada uno de los minutos de la cancha han estado destinados y pensados para este momento, para este partido, para esta final. Ya no cuentan las victorias, ni el hecho de que cada partido haya sido una más en nuestro haber. No sirve decir que hemos metido “x” goles, o que este o aquel es el average. Eso no vale. Ya no. No cuando te lo juegas todo en un partido en el que sólo vale el sí, o sí.
Una final que este año será madrugadora. Y es que el partido en sí se disputará el martes a las 10 de la mañana en el pabellón de nuestras contrincantes, la Politécnica de Valencia. Ellas llegan a esta final tras haber conseguido el pase en una disputadísima semifinal contra la UVEG en la que en el partido de ida se vieron superadas por un 5-3, pero hicieron valer la vuelta en casa con un 2-0 que les da el pase a la final. Por parte de nuestro equipo, no queda mucho más que decir. La semifinal contra la UMH cayó claramente en favor de Alicante.
Es posible que seamos favoritas; tal vez. Pero no vendamos la piel del lobo antes de cazarlo, hay que recordar que la UPV cuenta con grandes jugadoras, parte incluso de la selección valenciana de este año, y desde luego no nos lo pondrán precisamente fácil. Aún queda el último paso, el más importante, el que da el billete directo a las finales de Santander. Y una final siempre tiene el factor sorpresa. Así que hay que ir con la mentalidad humilde que hace que este grupo haya llegado a ser como es, y una vez allí trabajar como sabemos, todas a una, para lograr el primer objetivo.
De momento, y a la espera de que suene el silbato del comienzo, este será el plan de viaje:
- Se saldrá de la Universidad a las 6:30 de la mañana. (¡Se exige puntualidad!)
- El partido será a las 10 am.
- Entrega de trofeos después de los partidos de las 12.
- Comida en el pabellón de la UPV.
- Vuelta a Alicante.