El sábado tuvimos la suerte de poder contar en la grada con el que ha sido durante mucho tiempo, delegado, “utillero” y compañero de los devenir del grupo. Durante los últimos años, éste gran hombre se ha dedicado a cuidar esencialmente a los equipos de fútbol sala, en especial al equipo femenino. Siempre preocupado en que tuviéramos todo lo necesario, nos ha acompañado en las finales de los Campeonatos de España Universitarios y en las ligas del federado.
Por cuestiones personales nos vemos sin su compañía. Desde aquí te mandamos toda la fuerza del mundo y todo el ánimo, unas veintitantas sonrisas y la promesa de darte todas las alegrías que podamos, para devolverte así un trocito de todo lo que has hecho por nosotras.