Estas fotografías ilustran la trayectoria vital y los descubrimientos científicos de Galileo Galilei, el físico y astrónomo italiano que, junto con Kepler y Copérnico, comenzó la revolución científica que culminó con la obra del físico inglés Isaac Newton. Su principal contribución a la astronomía fue el uso del telescopio para la observación de los fenómenos celestes, mientras que en el campo de la física descubrió las leyes que rigen la caída de los cuerpos y el movimiento de los proyectiles.
Libertad para la ciencia. La contribución más importante de Galileo a la ciencia fue su descubrimiento de la física de las mediciones precisas, más que los principios metafísicos y la lógica formal. Sin embargo, tuvieron más influencia sus libros El mensajero de los astros y el Diálogo sobre los máximos sistemas del mundo, tolemaico y copernicano, que abrieron nuevos campos en la astronomía. Más allá de su labor científica, Galileo destaca como defensor de una investigación libre de interferencias filosóficas y
teológicas.
Giro copernicano. La historia de la astronomía dio un giro drástico en el siglo XVI como resultado de las aportaciones del astrónomo polaco Nicolás Copérnico. En su obra Sobre las revoluciones de los cuerpos celestes (1543), había analizado críticamente la teoría de Tolomeo de un universo geocéntrico y mostrado que los movimientos planetarios se podían explicar mejor atribuyendo una posición central al Sol. No se prestó mucha atención al sistema de Copérnico, o sistema heliocéntrico, hasta que Galileo descubrió pruebas para defenderlo. Gran admirador secreto de la obra de Copérnico, Galileo vio su oportunidad de probar la teoría copernicana sobre el movimiento de la Tierra cuando se inventó el telescopio en Holanda. Sus intentos de difundir este sistema le llevaron ante un tribunal eclesiástico. Aunque se le obligó a renegar de sus creencias y de sus escritos, esta teoría no pudo ser suprimida. En la imagen, Galileo hacia 1605, unos pocos años antes de sus primeras observaciones astronómicas mediante el telescopio.
También físico. Los intereses de Galileo no se limitaban a la astronomía: empleando planos inclinados y un reloj de agua perfeccionado, había ya demostrado que los objetos tardan lo mismo en caer, independientemente de su masa (lo que invalidaba los postulados de Aristóteles), y que la velocidad de los mismos aumenta de forma uniforme con el tiempo de caída. Los descubrimientos astronómicos de Galileo y sus trabajos sobre mecánica precedieron la obra del matemático y físico británico del siglo XVII Isaac Newton. En la imagen, retrato de Galileo en una de sus obras.
Proceso inquisitorial. En El Diálogo sobre los máximos sistemas del mundo, tolemaico y copernicano, Galileo abogó por la teoría copernicana, según el cual la Tierra giraba alrededor del Sol, frente a la tolemaica, que sostenía la creencia de que la Tierra era el centro del Universo. Se negó a obedecer las órdenes de la Iglesia católica para que dejara de exponer sus teorías, y fue condenado a reclusión perpetua. Hasta 1992 una comisión papal no reconoció el error de la Iglesia. En la imagen, un cuadro de Cristiano Banti (1857) que recrea el proceso.
Portada del Diálogo. Su obra Diálogo sobre los máximos sistemas del mundo, tolemaico y copernicano (Florencia, 1632) le valió tener que comparecer ante un tribunal del Santo Oficio. A pesar de haber obtenido dos autorizaciones oficiales para publicarlo, Galileo fue llamado a Roma por la Inquisición a fin de procesarle bajo la acusación de “sospecha grave de herejía”. Este cargo se basaba en un informe según el cual se le había prohibido en 1616 hablar o escribir sobre el sistema de Copérnico. El cardenal Belarmino, protector suyo, había muerto, pero Galileo facilitó un certificado con la firma del cardenal, según el cual no sufriría en el futuro ninguna restricción. Este escrito no pudo ser rebatido por ningún documento, pero Galileo fue obligado a abjurar en 1633 y se le condenó a prisión perpetua (condena que le fue conmutada por arresto domiciliario). Los ejemplares del Diálogo fueron quemados y la sentencia fue leída públicamente en todas las universidades.
Telescopio de Galileo. El óptico holandés Hans Lippershey fue probablemente el que construyó el primer telescopio en la primera década del siglo XVII. Galileo fue uno de los que lo utilizaron para observar los cielos. El telescopio que construyó galileo en 1609 era un telescopio de refracción, con lente convexa delante y una lente ocular cóncava. Con él descubrió las fases de Venus, lo que indicaba que este planeta gira alrededor del Sol. También descubrió cuatro lunas
girando alrededor de Júpiter. En la imagen, dos telescopios de Galileo conservados en el Museo de Historia de la Ciencia de Florencia.
Luna imperfecta. En diciembre de 1609 Galileo había construido un telescopio de veinte aumentos, con el que descubrió montañas y cráteres en la Luna. También observó que la Vía Láctea estaba compuesta por estrellas y descubrió los cuatro satélites mayores de Júpiter. En marzo de 1610 publicó estos descubrimientos en El mensajero de los astros. Su fama le valió el ser nombrado matemático de la corte de Florencia, donde quedó libre de sus responsabilidades académicas y pudo dedicarse a investigar y escribir. La imagen contiene uno de los dibujos de la luna realizados por Galileo en El mensajero de los astros.