La Paz de París firmada en 1763, ponía fin a la guerra de los Siete años y suponía la confirmación de la hegemonía inglesa en el mundo. La guerra había sido favorable a las armas españolas en el enfrentamiento con Portugal, pero frente a la flota inglesa las derrotas se habían sucedido, siendo ocupadas la Habana y Manila.
La escasez de los alimentos que se producirá en España por esas fechas, provocará una serie de revueltas populares que recomendaban la realización de una serie de obras de envergadura que mantengan ocupado al pueblo.
Obras de estas características son las de defensa, proyectadas por todo el Reino de Valencia por el Conde de Aranda, Capitán General de este reino. Alicante será una de las ciudades afectadas por esta medida.
El 26 de Julio de 1765 envió el Conde de Aranda una carta a la ciudad indicando cual serie el proyecto de fortificación. Son varios puntos los que toca; en primer lugar plantea una reforma del muelle. Un ensanche y una apertura de éste al lado de la Monserrate.
En segundo lugar, se ocupará de los elementos defensivos existentes en la ciudad y en particular del anillo defensivo del XVI. En un primer momento se propondrá la apertura de un arco en la Puerta de Elche para facilitar la comunicación de una parte a otra de la ciudad conservándose la muralla, pero en un segundo Memorial se decidirá a ordenar el derribo total de este lienzo del XVI, ya que quedaría inutilizado a la defensa.
La causa de que ahora se decida a este derribo y se considere ya a dicha muralla sin interés defensivo, está en la sustitución que propone de la cerca de tapia que envolvía al arrabal de San Francisco por una verdadera muralla.
De todos modos, pese a ser partidario de derribar esta muralla, propone que se conserven los torreones de San Francisco y San Bartolomé para memoria de su antigüedad, y con el fin de que hagan el papel de baterías.
La obra de mayor envergadura que plante Aranda es la construcción de un nuevo recinto defensivo exterior que sustituyera al trincherón. El Conde plantea un nuevo tipo de circunvalación con el fin de ensanchar la ciudad.
Por tanto, lo que se va a proponer es una verdadera ampliación de la Ciudad, quizá la primera en la historia de Alicante y que se realizará a principios del siglo XIX.
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