El comercio en la villa se incrementó en estos años y con ello aumentaron también los medios de transporte y el número de carruajes que pasaban por la villa. Para poder acoger este nuevo volumen de carruajes se creó un parador junto al cementerio que había en la puerta de Alicante junto a Santa Lucía.
El año siguiente se pidió la construcción de una cochera en los almudines (lugar de comercio de cereales), frente el convento de la Merced.
En el año 1573 se acuerda autorizar a los panaderos para que coloquen pan en las puertas de las casas donde se amasaba para el público.
En 1581 se establece el arancel de mesoneros en el que se estipula y se regulan los precios y estarían visibles colgados de la pared junto a la puerta:
- Habitación cerrada con una cama, un sueldo al día.
- Sitio en la mesa, dos dineros.
- Cama fuera de la habitación, seis dineros.
- Una caballería, sin pienso, un dinero por día (si tomaba cebada, nada).
- Un fajo de paja, dos dineros.
Además se establecieron una serie de normas a cumplir por los mesoneros:
- Los pesebres siempre debían estar limpios.
- No se tendrían animales.
- No se venderían pan u otros comestibles y vino.
- No se acogerían mujeres mundanas, ni hombres de mala vida o vagabundos.
Hasta el año 1595 no había tiendas de tejidos en la villa, por lo que las telas se compraban en Alicante o en Orihuela.
Si algún comerciante quería vender telas en la villa, no podía estar más de ocho días.
El concejo invito a los habitantes de elche a abrir negocios de este tipo en la villa para el crecimiento de esta y para ahorrarles el viaje, o que se permitiera a los comerciantes foráneos quedarse más tiempo en la villa.
En esta época ya existía el comercio de la palma blanca para el Domingo de Ramos, no solo a nivel local, sino que se exportaba por otras zonas de la península como Madrid.
En cuanto a la industria de la villa, en 1585, los Justicia y Jurados hicieron venir a la villa a un cantarero para que hiciera cántaros, platos y escudillas, para el servicio de la villa. Se le asignó una casa y 50 reales de ayuda para hacer el horno.
La fabricación de calzado inicia su desarrollo en estos años, sobre todo la industria alpargatera. En 1524 se fija el precio de la alpargata en 18 dineros para la suela de cáñamo y 9 para las de esparto. En 1601 se llega a un acuerdo entre los fabricantes de calzado para unificar clases y precios en la villa.
En esta época se crean diferentes gremios y cofradías de oficios para proteger el trabajo local y establecer las normas y precios que regían dichos oficios a través de los maestros gremiales.
Por ultimo habría que resaltar la industria jabonera que tenía dos dinámicas diferentes: la del minorista que contaba con pequeños comerciantes y labradores y el gran comerciante que se encargaba de exportar el producto en grandes cantidades y a mercados extranjeros a través del puerto de Alicante. Este tipo de comercio era prácticamente de tipo noble o de labradores hacendados (ricos).
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