Debemos tener en cuenta que en estos momentos, los territorios del Sur del reino de Valencia eran lugares de continuos ataques musulmanes. Estos, se adentraban en territorio cristiano y rescataban presos compatriotas tomando a su vez reenes cristianos (de igual forma que los cristianos), nada que ver con la campaña de Ridwan.
Este miedo continuo se ve reflejado en cartas del Consell de Elche a ciudades vecinas. Se construyeron toda una serie de dispositivos de alerta ante los ataques. En 1371, el gobernador de Orihuela avisa de un ataque granadino inminente, causando un renovado interés por las defensas y curiosamente la realización de actos religiosos para espantar al islam. Entre 1383-4 el peligro fue más real provocando una derrama para sufragar la reparación de los muros defensivos.
Desde Murcia se advierte de la inminencia del ataque, convocándose una reunión de autoridades reales y municipales de lo que fue en su día el Reino de Murcia. En esta reunión se acordó el habilitamiento de exploradores que avisasen de la situación, sufragando la cuarta parte del costo las poblaciones fronterizas del Reino de Valencia. Por último el 22 de enero como acto de defensa extremo se decidió colocar una cruz gótica de piedra en Elche que viene a reivindicar definitivamente esa tierra como cristiana.
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