Wikipedia
Las Cortes de Tomar de 1581 fueron concebidas por Felipe II para tranquilizar a los tres estados que en aquellos momentos no tenían plena confianza en el rey.
Restablecido de una epidemia, Felipe II de España partió de Badajoz a Elvas en 1580. El monarca estaba inquieto en lo que respecta al tercer estado, el pueblo. Al partir de Elvas ya en 1581 y pasando por Arronches, Crato y Ponte de Sor llegó a Tomar, donde iban a ser establecidas las Cortes.El monarca estaba asediado por los que le pedían el pago de sus servicios políticos que lo elevaron a su condición distinguida. Así veía Felipe II realizado su sueño ibérico. Días después aparecía en la puerta del Convento de Cristo el famoso edicto en el cual Felipe II indultaba a las personas relacionadas con la rebelión del prior de Crato contra su legítima autoridad. A raíz de esto los tres estados le pidieron al rey que les concediese los privilegios que les había prometido anteriormente. El rey les respondió diciendo que les haría llegar la respectiva carta de registro.
En estas las Cortes de Tomar de 1581, Felipe II intentó obtener el apoyo de los tres estados deliberando lo siguiente:
1. Respetar las libertades, privilegios, usos y costumbres de la monarquía portuguesa.
2. Reunir las Cortes siempre en Portugal y mantener las leyes portuguesas.
3. Los cargos de virrey o gobernador de Portugal deberán ser mantenidos por portugueses o mienbros de la familia real.
4. Los cargos previstos para la Corte y la administración general del Reino serán siempre ocupados por portugueses.
5. Los portugueses podrán también ocupar funciones públicas en España.
6. El comercio de la India y Guinea sólo podrá llevarse a cabo por portugueses.
7. No podrán ser concedidos títulos de ciudades o villas si no son a portugueses.
8. La lengua de las actas y documentos oficiales será en portugués.
9. Todos los años serán creadas doscientas nuevas viviendas (serán entregadas a los hidalgos a partir de los doce años) y la Reina deberá tener siempre como damasnobles portuguesas.
10. Las guarniciones castellanas serán retiradas.
Así quedarán acautelados los intereses de las clases altas, y tanto Portugal como España pasarán a ser gobernadas bajo la forma de Unión personal, o lo que es lo mismo, los dos reinos con un sólo rey.