La divulgación de la Constitución Española ayudó a difundir los derechos de los trabajadores, regular las relaciones laborales y los intereses económico-sociales, como la igualdad de condiciones, trato, acceso al empleo y salarios; ahora sin las rígidas normativas del franquismo
Así, el 10 de marzo de 1980, se aprueba el Estatuto de los Trabajadores en España, que supone una adaptación del derecho del trabajo a la nueva situación del país en periodo de transición Además, junto al Estatuto de Trabajadores se unió el nuevo texto refundido de la Ley de Procedimiento Laboral o la Ley básica de Empleo.
Sin embargo, podemos apreciar que hoy en día, todo aquello que costó conseguir en su momento y que hemos avanzado “pasito a pasito”, lo estamos retrocediendo a “zancadas”. Tal y como yo lo veo, la situación jurídica laboral actual de España en estos últimos años han supuesto una pérdida de la dignidad y los derechos de los trabajadores.
Derechos que ahora nos son arrebatados, como la indemnización de 45 días por año trabajado, la causalidad y criterio finalístico en el despido objetivo y modificación de las condiciones, la negociación colectiva libre y estable, los despidos colectivos causales, finalísticos y con autorización de la autoridad laboral, entre otros, no deberían ser manipulados.
En relación al marzo de 1980 en el que dio lugar a este avance en los derechos de los trabajadores, podemos contrastar las situaciones laborales actuales y apreciar el contraste mediante las viñetas de denuncia social de Forges: Juzgar por vosotros mismos.






