Valorización

Para realizar una correcta valorización de las tres portadas, debemos tener en cuenta tres
aspectos determinantes: la ubicación, los títulos y la presentación. En cuanto a la ubicación, analizaremos dos ámbitos; la paginación y el lugar de la página.

El primero de ellos trata de señalizar en qué página se inserta el texto. En los diarios franceses, la primera página se utiliza para insertar los asuntos prioritarios y, en general admitimos que un texto colocado en la página principal tiene más valor que un texto situado en páginas posteriores. En el caso de nuestros periódicos, ABC, El País y La Vanguardia, estos han incorporado en la primera página la misma noticia, lo que muestra que le otorgan igual relevancia. Por otro lado, en relación al lugar en la página, debemos destacar que ciertas ubicaciones llaman mayormente la atención. Un texto colocado en el ángulo superior izquierdo de la primera página, se encuentra en el lugar privilegiado. Sin embargo, en las portadas del 24 de febrero de 1981 de estos periódicos no se da este formato. En El País, advertimos que el titular se encuentra en el centro de la parte superior
de la página, antecedido por un titular de menor tamaño. En cambio, en la portada de ABC, el titular se sitúa en el centro de la parte inferior de la página, y en La Vanguardia se ubica en la parte superior.

A continuación, dividiremos el análisis de los títulos en tres aspectos: importancia real, importancia relativa y contenido. En cuanto a la importancia real podemos decir que presenta un columnaje marcado, es decir, que los títulos de dichos periódicos ocupan prácticamente todo el ancho de la página, lo cual valoriza notablemente el texto que presentan. Asimismo, los títulos tienen una altura y un espacio considerables, aunque en El País y La Vanguardia el título no eclipsa toda la portada y, en cambio, en ABC, este rompe la dinámica de la fotografía principal. Los caracteres empleados por parte de El País y La Vanguardia son estándar, mientras que en ABC se busca acompañar la noticia con caracteres firmes que además están escritos en mayúsculas.

En cuanto a la importancia relativa, los periódicos son rotundos: el Golpe de Estado se establece como prioritario ante otras noticias. En este caso, los dirigentes de dichos periódicos otorgaron al asalto armado el mismo peso. Además, el análisis del contenido revela dos tipos de títulos; uno sensacional y otro orientado. En el caso del ABC podemos decir que se trata de un título sensacional que busca llamar la atención del lector, mientras que los títulos utilizados por El País y La Vanguardia son de un carácter más informativo.

Otro de los aspectos importantes es la presentación, que dividimos en tres ámbitos: ilustración, tipografía y estructura. Para empezar, es importante mencionar que una imagen aumenta considerablemente la importancia de un texto. En estas portadas – a modo de prueba visual – la imagen seleccionada es la misma, aunque ABC expande la fotografía a lo largo y ancho de toda la página, mientras que El País reduce su tamaño a algo más de media página, al igual que La Vanguardia, quien le da una mayor importancia al texto. Se trata de una instantánea en la que el general Tejero se halla en el palco del Congreso de los Diputados, con una mano levantada y un arma en la otra, respaldado por un grupo de guardias civiles con armas. Esta imagen de Manuel Pérez Barriopedro, refleja a Tejero exigiendo silencio a los congresistas. Fue una de las imágenes del 23-F más reproducidas, resultando ganadora del Premio Nacional del Periodismo y el World Press Photo. Se trata de una fotografía muy ilustrativa que ABC decidió no acompañar con ninguna leyenda, mientras que El País incorpora una cita que dice: “El terrateniente coronel Tejero, conspirador de la operación Galaxia, al mando de un grupo de rebeldes, ocupa el palacio del Congreso de los Diputados, y desde el atril de oradores conmina a los parlamentarios, pistola en mano, mientras que otros guardias civiles les encañonan con sus fusiles automáticos y les obligan a tenderse en el suelo bajo sus escaños”, mientras que La Vanguardia también coloca un pie de foto: “Eran las 18:25 horas. El teniente coronel Tejero, pistola en mano, interrumpió la sesión de las Cortes, según muestra esta foto, obtenida en dificilísimas circunstancias”.

Por otro lado, profundizando en la tipografía podemos decir que ABC realiza una estructuración somera y directa, basada en un único título central en negrita que realza por sí solo el contenido principal del periódico. Por su parte, El País divide sus textos en diferentes sectores de la página, otorgando la importancia principal al título central, en mayúsculas, que viene acompañado de otros títulos explicativos y mensajes, que están diseñados en menor tamaño.

Finalmente, haciendo ahínco en la estructura podemos comenzar examinando la fragmentación. La portada de ABC remite directamente a seguir leyendo las páginas del diario, pues solo observamos la imagen del suceso y su título. Sin embargo, El País incorpora, además de la fotografía, el inicio del artículo que narra el acontecimiento, que también se prolonga a páginas posteriores, de igual manera que La Vanguardia. Asimismo, la composición del texto también es distinta en los tres periódicos; ABC presenta la información sin comentarios, pues el impacto contundente de la portada se explica en las páginas del interior, mientras que El País, aporta la información junto a los comentarios, y La Vanguardia incorpora una gran cantidad de texto explicando los acontecimientos, tanto el Golpe de Estado en sí, como el Mensaje del Rey.

Con todo, vemos que El País, además del logotipo, reflejó en la portada la firma de su director Juan Luis Cebrián. La Vanguardia, por su parte, también incluye los datos técnicos en la cabecera, cosa que no se da en ABC, donde solo aparece el logotipo. También es importante destacar la longitud del texto, aunque la brevedad de este no afecta a su relevancia. El País elaboró un artículo breve, que ocupa cuatro columnas de la portada, mientras que La Vanguardia realiza un resumen de los acontecimientos dividido en cinco columnas, además de incluir, de manera íntegra el Mensaje del Rey en la parte inferior de la portada en tres columnas, y ABC reservó la narración de los hechos para el interior del ejemplar.