Simbolismo en la Pintura y en la Escultura

Los actos de mecenazgo y el encargo de obras durante el Renacimiento estaba al orden del día. Para ellos se hacían disponer todas las artes posibles del momento al servicio de los burgueses que podían permitírselas. Un ejemplo de ello es el retrato pedido y pagado por Giovanni Arnolfini a Jan Van Eyck nombrado con anterioridad. Es fechado a inicios del Renacimiento y muestra al matrimonio Arnolfini, Giovanni Arnolfini y Jeannna Cenami, quienes se establecieron en la ciudad portuaria de

Brujas, en la actual Bélgica. Allí, Giovanni Arnolfini, mercader originario de la ciudad toscana de Lucca que buscó y acabó encontrando prosperidad y riqueza en la región de Flandes Occidental. Es en esta ciudad flamenca donde encarga a finales de la primera mitad del siglo XV un retrato muy detallado a uno de los hermano Van Eyck. Esta obra no solo muestra al matrimonio propiamente dicho, sino muestra una gran variedad de figuras simbólicas.

Es el historiador del arte alemán Erwin Panofsky quien realizó el análisis pictórico de la obra y su simbolismo en su articulo “Jan van Eyck’s Arnolfini’ Portrait” en la revista The Burlington Magazine en 1934.   Un ejemplo de este simbolismo lo podemos encontrar en las naranjas y la alfombra que podemos ver en esta obras, los cuales son productos importados, uno del sur de Europa y otro de la zona de A
natolia, con los que se muestra el poder y la riqueza de la que Giovanni Arnolfini ha
ce gala. En esta obra no solo se representa el poder económico de Giovanni, además, entre otros motivos, encontramos símbolos que muestran un sentido religioso en la obra, como son los rosarios o el espejo con 10 de las 14 paradas del Via Crucis con el que se intenta insinuar el sacrificio que deben realizar los esposos. Prácticamente toda la composición del cuadro tiene algún simbolismo, llegando a proyectar varias ideas y sentimientos que el mecenas desea plasmar en la obra como pueden ser fidelidad, fertilidad o amor, además de las ya explicadas.

Este simbolismo no solo lo encontramos en la pintura ni de forma individual, existen obras escultóricas, como el David realizado durante el Quattrocento italiano por Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello. Esta escultura realizada en bronce es considerada el primer desnudo escultórico renacentista y fue  encargada por la familia Médici como muestra de la supremacía florentina frente a los duques de Milán y sus frecuentes hostilidades. Esto lo podemos observar en las coronaciones de las dos cabezas, tanto David como Goliat. David es representado de forma juvenil, coronado con un sombrero típico de los granjeros florentinoos, desnudo y sujetando con una mano la piedra mortal y con la otra la espada de su enemigo con la que lo ha decapitado, mientras que la cabeza de Goliat es representada como un rudo y salvaje con un casco que hace una clara referencia al Ducado de Milán. De esta forma, Donatello consigue mostrar la rivalidad entre ciudades tanto bélica como económica y la supremacía de una frente a la otra.

Estos dos impresionantes obras de arte son solo un ejemplo del simbolismo que podemos encontrar en cualquier expresión artística durante el renacimiento donde en cualquier momento se intenta plasmar las riquezas y poder del individuo como de la sociedad donde vive.

BIBLIOGRÁFIA Y REFERENCIAS:

• OCAMPO, E. y PERAN, M.: Teorías del Arte. Barcelona, 1998.
•  POPE GENESSY, J.: La escultura italiana en el Renacimiento. Madrid. 1989
• http://es.slideshare.net/desperdicios/david-donatello-30396082 (Consulta  dia: 05/12/15, hora:19:32)
• http://www.aloj.us.es/galba/MONOGRAFICOS/VERMEER/arnolfini.htm (consulta  dia: 05/12/15, hora:20:02)
• https://artesinfin.files.wordpress.com/2013/12/matrimonio-arnolfini-jan-van-eyck.jpg
• http://es.wahooart.com/Art.nsf/O/8Y36VV/$File/Donatello-David-4-.JPG