Cada vez quedan menos aspectos de la vida que no hayan sido puestos vuelta al aire por el auge de los smartphones, y tener un dispositivo con tan potente y versátil como un ordenador no iba a dejar indiferente al mundo de la medicina, las mobile medical apps han venido para quedarse.
Tanto para los pacientes como para los médicos, los teléfonos inteligentes, tabletas y relojes son una oportunidad única para realizar tareas simplificando la cantidad de utensilios utilizados, reduciendo costes y aumentando la comodidad. Actualmente existen cerca de 100.000 aplicaciones de carácter médico, un 70% de ellas está destinada a la información y sensibilización, mientras que un 30% está destinada a médicos y pacientes.
Hace sólo unos años, controlar nuestra salud a través de un reloj y un teléfono podía parecer una historia de ciencia ficción, pero lo cierto es que la tecnología ya ha dado varios pasos y es muy posible que en un futuro muy próximo sea algo rutinario.