En esta práctica se evalúan las tensiones máximas y mínimas en un calderín sometido a distintos niveles de presión interior. Se aplica una roseta extensométrica y los círculos de Mohr para calcular deformaciones máximas y mínimas y de ahí con las Leyes de Hooke Generalizadas la relación entre la presión interior y las tensiones en la superficie del calderín.