Si alguna vez tu móvil ha “muerto” dejándote sin conexión con el mundo exterior, sabrás de la importancia de algunas aplicaciones para recuperación de datos, ya sean nuestras preciadas fotos, conversaciones de whatsapp, contactos de Tinder y casi en la misma medida, la agenda…
Afortunadamente, en el mercado podemos encontrar multitud de herramientas para recuperar esta información, con mayor o menor éxito, y de manera mas o menos profesional.
Buscando información sobre este tipo de software en algunos foros acabo contactando con Ignacio, director de la agencia de detectives privados en Madrid www.ochoadetectives.com, quien nos cuenta que actualmente, muchos clientes recurren a sus servicios para recuperar esa información, tanto de sus smartphones como de los de su pareja, hijos o empleados…
La obtención de estos datos eliminados, intencionada o accidentalmente, sirve en ocasiones para otros propósitos menos sinceros, como descubrir posibles infidelidades, competencia desleal, compañías dudosas de sus hijos e incluso en ocasiones han sido la clave para localizar a personas desaparecidas.
La información y datos que almacenamos en nuestros dispositivos electrónicos guarda pistas sobre nuestra conducta, contactos, actividades, localización, preferencias de locales, búsquedas en internet y un sin fin de oportunidades de que cualquiera pueda conocernos demasiado.
A la hora de realizar el análisis forense de dispositivos digitales, además de valorar los aspectos legales de dicho procedimiento, es fundamental contar con una correcta metodología que nos permita abordar dicho análisis con garantías.
Intentar realizar este trabajo por parte de personas sin experiencia ni conocimientos solamente servirá para destruir las pruebas digitales, y dichas “pistas”, al igual que en una autopsia realizada por un forense, pueden ser fundamentales a la hora de obtener las evidencias que buscamos.
Desde Ochoa Detectives insisten en poner en manos de profesionales nuestros dispositivos cuando queramos hacer una recuperación de datos eliminados, pues es la única manera de salvar esa información.
Según nos indican, algunos de los equipos y herramientas mas utilizados por profesionales son los de la firma Cellebrite o la empresa Oxygen Forensics.
En todos los casos, se debe seguir un modelo forense consistente en la Autorización y Preparación, Identificación, Documentación, Adquisición y conservación, Extracción de Información, Análisis de la información obtenida, Reconstrucción y finalmente la publicación de las conclusiones.
Esto tiene mayor importancia aún cuando las evidencias digitales van a ser utilizadas como pruebas judiciales, siendo imprescindible contar con un investigador o perito informático cualificado.
Actualmente, según nos explican en la agencia de detectives Ochoa, los casos relacionados con las nuevas tecnologías se han incrementado considerablemente, y muchas personas les solicitan información para realizar algunas investigaciones que son totalmente ilegales y que por tanto no se pueden aceptar, tales como “espiar” conversaciones de Whatsapp, “pinchar” teléfonos móviles, instalar software espía en dispositivos electrónicos…
También nos indican que su actividad se encuentra claramente dentro de los límites de la ley, y por tanto, a pesar del interés que estas supuestas investigaciones suscitan, no se pueden realizar por ser ilegales.
No obstante, agencias como la consultada y algunas otras están invirtiendo tanto en medios humanos como en tecnología para “fichar” entre sus equipos a detectives especializados en el peritaje electrónico, investigación informática y análisis de dispositivos digitales. De esta manera, aceptan el reto de adaptar la profesión a los nuevos escenarios digitales.
Deja un comentario