Esta portada de El Jueves dedicada a Gorbachov (1986) me ha recordado estas fotografías que sin duda marcaron el principio del derrumbe ideológico de la URSS.
¿Colas ante un Mc Donald’s y una “tienda” de Pepsi? ¡Habrase visto…!
Esta portada de El Jueves dedicada a Gorbachov (1986) me ha recordado estas fotografías que sin duda marcaron el principio del derrumbe ideológico de la URSS.
¿Colas ante un Mc Donald’s y una “tienda” de Pepsi? ¡Habrase visto…!
El fútbol tiene un gran poder de convocatoria, eso lo sabemos todos, pero… ¿siempre ha sido así? Veamos dos viñetas dedicadas a la final de la Copa del Mundo de 1966, que enfrentó a Inglaterra y Alemania Occidental. Ganaron los primeros 4 a 2.
Apuesto a que el gato tampoco puede esperar para la final – Papá está sentado encima de él.
Orden, orden, está extraordinaria asamblea general del TUC acaba de empezar.
La segunda viñeta supongo que será una crítica de la decadencia del sindicato TUC, agravada quizás por la desmovilización obrera que la fiebre futbolera ha provocado en el país (Ya se sabe, el fútbol nos aisla de nuestros problemas durante 90 minutos más el descuento, si no hay prórroga y/o penaltis…)
Créditos: la primera es de David Myers (Evening News), y la segunda de Jak (Evening Standard) Día 28 de julio de 1966.
Como suena: Daredevil combatió a Hitler en julio de 1941, antes incluso de la entrada en la guerra de los EE.UU, que se produjo cinco meses después, en diciembre (Justo después del ataque a Pearl Harbor)
Aquí la portada:
El encuentro entre los dos:
Daredevil irrumpe en la reunión privada:
– Buenas tardes, belicistas. ¿Queréis conocer mi tropas personales de choque?
Y vaya si las conocieron:
– Golpe número uno.
– Número dos.
– Número tres.
Para descargo de Hitler, hay que decir que este Daredevil no es el invidente. En esta época aún veía. Alguna persona maliciosa dirá que con el Darevil “actual”, Adolf Hitler lo hubiera pasado mucho peor.
Esta simple anécdota puede que no lo sea tanto. Adelanto que tengo cuatro historietas de principios de los años 50 que demuestra que un cómic también podía ser utilizado para propaganda.
Bonustrack: Esta mañana, comentando el tema con un compañero me comentó que existía otro cómic en el que aparecía Dios castigando a Hitler porque había crucificado a su hijo. Por desgracia (o no), sólo he podido encontrar la portada. Y qué portada:
– ¡¡Hitler crucificó a mi hijo!!
– Estoy salvado.
No he podido encontrar el año de publicación. Así que no me termino de fiar sobre si es auténtico o no. Tanto surrealismo me descoloca.
ACTUALIZACIÓN 4-10-2008: se me olvidó citar la fuente que inspiró mi búsqueda.
¿Ocupación de su esposa? ¿Organizadora del movimiento de liberación de la mujer?
Ahora que lo miro bien, no sé si el chiste es feminista, machista o sólo eso, un chiste.
Lo encontré en The SFU Library Editorial Cartoons Collection (SFU para abreviar)
Ah, se me olvidaba: el dibujo es de Edd Uluschak, para el Edmonton Journal (17 de junio de 1970)
¡Todavía soy realmente escéptico de la existencia de vida inteligente allí, profesor!
Y yo añadiría: “no hace falta invadirlos, ellos solitos van a destruirse”.
Vicky publicó esta viñeta en el Evening Standard el 13 de abril de 1965, en aquellos días en los que la amenaza de una hecatombe nuclear (infundada realmente) y el descubrimiento del espacio se daban la mano.
¿Por qué los chistes sacrílegos son tan populares? Porque son sacrílegos, es una consecuencia directa de la secularización de occidente. Sin embargo, a veces el mal gusto hace que escondamos la sonrisa que teníamos preparada. Esta viñeta de Alberto Montt es todo lo contrario: aborda el papel secundario (e incómodo a veces) de San José en los Evangelios con maestría. Como dicen en los comentarios en la entrada de su blog, es una pieza de humor inteligente.
Por cierto, Montt tiene cuenta en Flickr. Es interesante echarle un vistazo.