Las mujeres del Foro de Vida Independiente han conseguido, con su arrojo y valor, una parte importante de sus reclamaciones. Ya solo resta que todo el ferrocarril español sea accesible. Mientras tanto, no cesarán en su empeño por hacer cumplir las leyes que han sido legisladas, a pesar de que tanto las administraciones públicas como las organizaciones que se jactan de representar a las personas con diversidad funcional miren para otro lado.
A. G., Valencia
Las protestas de los colectivos de discapacitados han surtido efecto. Renfe ha dado «indicaciones precisas » a todo su personal para que no nieguen el derecho a viajar a una persona con discapacidad aunque la estación no esté catalogada como accesible, siempre que no necesite ayuda, se la procure él mismo o se la puedan dar los operarios. Renfe y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) pusieron en marcha en julio una guía en la que definían como adecuadas para discapacitados 7 de las 56 estaciones de la C. Valenciana. Según las denuncias de afectados, ello ha dado pie a que se vetara el acceso a paradas que antes eran usadas. Ante las protestas, Renfe ha tomado medidas de mejora, según un texto del Comité de Representantes de Discapacitados (Cermi).