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R. Pascual / MADRID (08-11-2007)
La puesta en marcha de la Ley de Dependencia se está llevando a cabo de forma más lenta que la esperada. Así lo demuestran los datos facilitados ayer por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Senado, donde avanzó que hay 25.000 personas en toda España ‘que ya tienen la garantía de la prestación’.
Si se tiene en cuenta que los cálculos del Gobierno cifraban en 200.000 los dependientes que debían estar atendidos con la prestación de dependencia en 2007, las cifras facilitadas ayer por Zapatero indican que dichas ayudas sólo están reconocidas ahora al 12% del total de beneficiarios previstos.
Según un informe de Comisiones Obreras, el 99% de estos beneficiarios ya estaba antes internado en una residencia, ya que el colectivo protegido en 2007 es el de ‘grandes dependientes de grado 3’, los que menos pueden valerse por sí mismos.
Los datos que aporta este informe sobre la implantación de la Ley de Dependencia indican que, hasta la fecha, las comunidades han recibido aproximadamente 200.000 solicitudes de valoración, de las que cerca de 121.500 ya se encuentran registradas en el Sistema de Información del Sistema de Atención a la Dependencia. De éstas personas, se han comenzado a valorar 42.391 casos; se han registrado 32.158 dictámenes reconociendo grado y nivel de dependencia y se han reconocido las 25.000 prestaciones que señaló ayer Zapatero.
Desigualdades regionales
En cualquier caso, la implantación de la norma está siendo muy desigual, según las regiones. En un primer grupo se sitúan las comunidades que más solicitudes han registrado y mayor proporción de valoraciones han realizado, entre las que están Andalucía, Aragón, Canarias, Cantabria, Cataluña, Castilla-La Mancha, Extremadura, Baleares, Ceuta y Melilla.
En segundo lugar, están las regiones que aún habiendo puesto en marcha la ley, van más retrasadas en sus valoraciones. Estas son: Comunidad Valenciana, Asturias, Galicia, La Rioja, País Vasco y Navarra. Finalmente, los Gobiernos de Madrid, Castilla y León y Murcia son los que prácticamente no aplican la norma.
Si bien sólo cinco comunidades han roconocido prestaciones: Andalucía, Valencia, Extremadura, Cantabria y Baleares.
No obstante, Zapatero restó importancia a la lentitud con que se está aplicando la ley y dio un mensaje de ‘tranquilidad y seguridad’ de que la ayuda llegará este año a todos los hogares donde viva un gran dependiente.
El copago y la calidad en el empleo, sin cerrar
A pesar de que la Ley de Dependencia se está ya aplicando, quedan pendientes de desarrollo normativo dos elementos muy importantes de la norma. Se trata de la definición del copago, que fijará, en función del patrimonio de cada beneficiario qué parte de la prestación debe abonar con su dinero y cuál se costeará con dinero público. De momento, la ley prevé que, de forma provisional y hasta que el Gobierno y las comunidades autónomas definan el copago en el Consejo Territorial, cada región seguirá dando las prestaciones tal y como venían haciendo sus servicios sociales. Y, en segundo lugar, las Administraciones deberán aprobar la acreditación de calidad del empleo, que determinará los requisitos que deben exigirse a los profesionales del sector.
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