GRISOLÍA, Santiago. El arte de dar la vida. Arbor: Ciencia, pensamiento y cultura. Marzo 2001, vol. 168 (nº 663), pp. 287-292. ISSN 0210-1963.
Este texto, escrito por Santiago Grisolía, es mucho más que una fórmula química, más que un procedimiento médico, más que un descubrimiento revolucionario. Este ensayo habla de nosotras, de nuestras vidas y de nuestro papel como mujeres, esposas, científicas, hembras, investigadoras, amantes, profesionales, madres. Aquí se analizan fundamentales descubrimientos en el campo biológico y científico pero, se tratan también temas mucho más sutiles e igualmente importantes para ofrecer al entero género humano diferentes maneras de pensar y nuevas ideas perfectamente comprensibles, incluso para los que no pertenecen a los “entendidos”.
Puede parecer raro que un texto como éste pueda ser un fragmento de los documentos de un grande científico llamado Santiago Grisolía, sin embargo su grandeza está también en eso: celebrar a la mujer no sólo como profesional sino también como ser humano igualmente digno de alabanza y de mérito; según él es precisamente por la valentía, la dote y la determinación de algunas grandes mujeres que la ciencia, hoy en día, puede disfrutar de nuevas importantes herramientas. A la mujer se le otorga un nuevo reconocimiento social y científico puesto que “sobresale como ejemplo de excelencia y de sacrificio” en muchas profesiones científicas y, sobre todo, en la vida diaria.
Se trata de un viaje a través del tiempo, de la historia y de la ciencia en el que la mujer desempeña un papel fundamental gracias a su lucha continua por sus derechos y por sus conquistas con la constancia, la imaginación y la inteligencia que la caracterizan.