La expulsión de los moriscos

En el año 1609 tuvo lugar uno de los episodios que marcarían el presente y futuro de España. En este año tuvo lugar la expulsión de todo el país de aquellos musulmanes convertidos al cristianismo, los llamados moriscos. Un bando dictado por el Marqués de Caracena, virrey de Valencia, daba orden de la expulsión inmediata en un plazo máximo de tres días. El Duque de Lerma, tiempo atrás, ya había anticipado este movimiento con la idea de: “que todos los reinos de España queden puros y limpios de esta gente como conviene”. Se ponía fin de este modo a nueve siglos de presencia musulmana en España.

Varios fueron los motivos por los cuales se llevó a cabo la expulsión:

  • Desconfianza tras la rebelión de las Alpujarras.
  • Los posibles contactos con piratas berberiscos y la sospecha de una posible rebelión.
  • Las envidias suscitadas por la creencia de tener grandes riquezas escondidas y más mano de obra al tener más hijos.

Estas razones no eran más que propaganda, falsedades y tópicos que en muchos casos no pasaban de ser meras generalizaciones. Estos son solo algunos de los motivos pero en general se aluden a razones políticas y religiosas. Lo que se pretendía era generar una imagen negativa de esta minoría.

4g Embarcament dels moriscos al port de Denia. Vicent MestreCuadro Embarco de moriscos en el Grao de Vinaroz de Francisco Peralta, 1613.

Los moriscos de Alicante, del mismo modo que ocurría en toda la Corona de Aragón, siguieron llevando a cabo sus ritos y tradiciones en la clandestinidad pese haberse convertido al cristianismo. Desde el puerto de la ciudad alicantina partieron contra su voluntad unos 46.000 moriscos con destino incierto, siendo este principalmente la costa del norte de África. De este modo la provincia de Alicante perdió en torno al 35% de su población.

Esta expulsión supuso una tragedia, además de demográfica, económica ya que muchas tierras quedaron sin agricultores que la trabajasen. De esta medida, como no podía ser de otra manera, se benefició la élite de la época; las tierras abandonadas fueron adjudicadas a los grandes señores por ser de su propiedad o por compensación real al perder tan preciada mano de obra.

El viaje en busca de un nuevo hogar no fue fácil para estos moriscos los cuales además de verse obligados a abandonar o malvender sus pertenencias, tuvieron que pagar pasajes abusivos y en muchos casos ser saqueados y robados antes de llegar a sus destinos.

Por otro lado tenemos a los llamados “morisquillos” aquellos menores de cuatro años a los que no se obligó a marcharse y que se quedaron en España. Se considera que entre toda la provincia de Alicante se quedaron más de mil de estos niños aunque es difícil precisar la cifra exacta en la ciudad. Más adelante dedicaremos una entrada para conocer un poco más de lo que fue de estos niños moriscos.

Esta expulsión tiene aún hoy su eco. Si miramos un directorio de apellidos en Túnez, uno de los puntos donde más moriscos llegaron, podremos ver como se repiten algunos asociados con Alicante, siendo comunes los apellidos: Alakanti, Lacanti o Hakanti.

Si os interesa el tema y quereis conocer un poco más de este momento histórico aqui teneis un video: http://www.youtube.com/watch?v=bw0coHJuOr0&list=PL153k_fxJ6tt0KWqnLNlfWD8_gnP8-Vdm

This entry was posted in Población and tagged , , , , . Bookmark the permalink.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *