Aquí os dejamos un texto muy interesante sobre la Expulsión de los Moriscos realizado por el profesor Manuel Ardit, de la Universidad de Alicante.
Universidad de Alicante. Departamento de Historia Medieval, Historia Moderna y Ciencias y Técnicas Historiográficas
ARDIT LUCAS, Manuel. “Una reflexión sobre la expulsión de los moriscos valencianos y la repoblación”. Revista de Historia Moderna. N. 27 (2009). ISSN 0212-5862, pp. 295-316
La historiografía sobre los moriscos y su expulsión estuvo determinada por todo un conjunto de prejuicios ideológicos. Los contemporáneos de la expulsión, al menos los que tuvieron ocasión de dejar constancia escrita, adoptaron una posición que podemos llamar moriscófobia. Consideraban que la población morisca valenciana era económicamente poco relevante, dado el carácter minifundista y atrasado de la agricultura que practicaban. Al mismo tiempo pensaban que su población crecía a un ritmo mayor que la cristiana, debido al matrimonio universal y precoz que practicaban, ya que las que llamaban «cargas del matrimonio» eran para ellos poco exigentes y no practicaban el celibato. Los historiadores y publicistas del siglo XIX, fundamentalmente los liberales, adoptaron una actitud moriscofila, fundada en una percepción absolutamente contraria. Los moriscos eran una minoría económicamente muy activa y eficiente. Por lo tanto, su expulsión el año 1609 supuso un grave quebranto. Sin embargo los historiadores conservadores, interesados en la canonización del patriarca Ribera, mantuvieron el punto de vista moriscófobo. Los historiadores actuales han oscilado entre la moriscofilia y la moriscofobia, pero por razones menos ideológicas, como una explicación de un supuesto atraso económico valenciano, consecuencia de la expulsión de los moriscos y una repoblación que reforzó el régimen señorial.