Final de la Edad Media y principios de la Edad Moderna

En el siglo XV la población se asentaba en las faldas del castillo dentro del recinto amurallado.
En el siglo XV la población se asentaba en las faldas del castillo dentro del recinto amurallado.

Las dificultades que en forma de calamidades naturales, pestes y enfrentamientos bélicos habían afectado a todo el reino de Valencia a lo largo del siglo XIV también se dejaron sentir en la comarca de l’Alcoià. Además, Castalla a lo largo de la historia ha sufrido diversos ataques debido a que se encontraba entre dos reinos por lo que se llevó a cabo una legislación que favoreciera a sus habitantes dándoles una serie de ventajas y así evitar su despoblación. Como sucedió del mismo modo en el resto del reino, a finales del XIV, los contingentes demográficos de estas comarcas meridionales habían recuperado, cuando no superado, los niveles alcanzados a principios de siglo.

Antes de la construcción de la iglesia parroquial María Asunta se utilizaba la ermita como iglesia.
Antes de la construcción de la iglesia parroquial María Asunta se utilizaba la ermita como iglesia.

La población de este territorio, a diferencia de las regiones centrales y septentrionales del reino, se mostró mucho más resistente a la hora de hacer frente a los problemas demográficos. Mientras comarcas como els Ports, el Maestrat, la Plana, la Ribera o la Costera perdían en el transcurso de la centuria entre la mitad y los dos tercios de sus efectivos humanos, las comarcas de l’Alcoià y el Comtat consiguieron no solo escapar a esta tendencia depresiva, sino que en algunos casos lograron incrementar, incluso de manera considerable, sus volúmenes demográficos. En el caso concreto de Castalla el número de casas habitadas aumentó de unas 90 en 1456 a 123 en 1507, lo que supone un crecimiento de un tercio de la población que estaría en torno a los 500 habitantes.

Este incremento poblacional se dio gracias a la propia dinámica interna de la población que incrementó tanto los índices de natalidad como de fecundidad además del estancamiento o incluso retroceso de la mortalidad. También, dichas poblaciones, se vieron beneficiadas por los intensos movimientos migratorios que se dieron dentro del Reino de Valencia y que caracterizaron este periodo. En Castalla, la mitad de los linajes documentados en 1507 se habían renovado en relación a los existentes en 1456. El resultado final de todo este proceso fue una profunda modificación en la jerarquización interna de la población de l’Alcoià.

Un incremento sostenido, unos crecientes índices de urbanización, una nueva jerarquización del territorio y distribución de la población constituyen las características que definen las tendencias principales de la evolución demográfica de la comarca de l’Alcoià entre finales de la Edad Media y comienzos de la Moderna.


Posted

in

by

Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *