En esta entrada veremos la herencia percibida por Carlos I, que supuso la creación de un gran Imperio.
Carlos I de España (1500-1558), hijo de Felipe el hermoso y Juana “la loca”. Subió al trono español en 1516 y fue proclamado emperador de Alemania en 1519 por el papa Clemente VII. Su amplio poder se debió a la magnífica herencia que percibió de su familia. La herencia recibida por ambas ramas familiares fue inmensa y ocasionó la creación del Imperio español que perduró durante varios siglos, consagrando a la monarquía hispánica.
La herencia por la linea de los abuelos paternos, Maximiliano de Austria I y María de Borgoña constituía las regiones centrales de la zona europea. Por parte de María de Borgoña recibió el antiguo círculo de Borgoña, que reunía a doce provincias Artois, Bravante, Flandes, Hainut, Limburgo, Luxemburgo, Holanda, Zelanda y el Franco-Condado, además de los condados de Namur, Amberes y Malinas. Esta era una de las zonas más desarrolladas del continente europeo y supuso para el Imperio una fuente de riqueza inmensa. Poseían cierta autonomía, debido a la influencia de la nobleza local. Mientras esta estuvo a favor del monarca, no hubo ningun problema.
Por parte de su abuelo Maximiliano obtuvo los siguientes territorios: Austria, Estiria, Carniola, Corintia y el Tirol. Además de la oportunidad de coronarse rey del Imperio Germánico, que obtuvo previo pago, de una gran suma de oro. Pese a ser el emperador, muchas de las zonas comprendidas en este Imperio Germánico, practicamente actuaban como estados independientes debido a sus grandes riquezas. Se produjeron una serie de tensiones durante su reinado que provocaron revueltas y escisiones religiosas que debilitaron su poder en la zona, finalmente tuvo que ceder este territorio a su hermano, porque no podía hacer frente a los problemas derivados de su administración.
Por parte de los abuelos maternos recibió la parte más meridional de su territorio. De su abuela Isabel heredó la Corona de Castilla, con las plazas del norte de África (Oran,Ceuta, Melilla y Túnez) y las posesiones de América (conjuntas con su abuelo Fernando). Esta zona se podría considerar la columna vertebral del imperio de Carlos I, gracias a la ingente cantidad de oro llegada desde dicha zona. Durante su mandato consolidó la unión de Aragón y Castilla.
De su abuelo Fernando percibió Aragón, Cerdeña, Sicilia y Nápoles. Carlos I tuvo una gran influencia en la zona italiana, que pese a ser de las zonas más ricas de Europa, estaba sumida en el caos político, por su escasa capacidad militar. Esto ocasionó que Francia y España se disputaran la hegemonía de la zona italiana, ya que estos si disponían de un fuerte apoyo militar para hacer efectivo el control de dicha zona.
En esta entrada he mencionado la herencia de Carlos I, en el proximo veremos las conquistas de su reinado y también la problematica alemana, que le llevo a otorgarle el trono imperial a su hermano Fernando.