Martin Luther (1483-1546). Nació en Eisleben el 10 de noviembre de 1843. Fue el primero de los ocho hijos de Hans Luther y Margarita Ziegler. Poco tiempo después de nacer, sus padres se trasladaron a Mansfield donde su padre comenzó a trabajar como minero, prosperando con el tiempo. Fue aquí en Mansfield donde Martín comenzó sus estudios primarios.
Desde bien pequeño, Lutero destacó por sus dotes intelectuales, aprendiendo latín con facilidad. Por esta razón su padre, que tenía grandes planes para él, lo envió a Magdeburgo para que asistiera a la escuela dirigida por una congregación de los Hermanos de la Vida en Común. En este lugar Lutero recibiría fuertes influencias cristianas. Su padre descontento con tanta religiosidad, decidió que continuara sus estudios preuniversitarios en Eisenach. Aquí se relacionaría con una de las matronas de las “Schalbecotta” recibiendo más influencias religiosas.
En 1501 ingresó en la Universidad de Erfurt. Este paso supuso para Martín un gran cambio en su vida puesto que a partir de ese momento estudiaría sin obligaciones.
Apodado “El Filósofo” por sus compañeros de la Facultad de de Artes confraternizó con ellos pero sin participar en las actividades que se ofrecían en la ciudad ya que despreciaba la ciudad por sus tabernas y prostíbulos. Se graduaría en 1505 como Maestro en Artes siendo el segundo de su promoción.
A petición de su padre, Lutero continuaría sus estudios en la Universidad de Derecho de Erfurt. Dos meses más tarde durante el viaje de regreso de casa de sus padres en medio de una tormenta un rayo cayó a sus pies. Su temor hacia la ira divina le hizo encomendarse a Santa Anna, patrona de los mineros, prometiendo que si salvaba la vida se convertiría en monje. Días después Lucero cumpliría su voto ingresando en el convento de la Órden de San Agustín en la ciudad de Erfurt. Esta fue la primera decisión que Martín tomó en su vida, sin el beneplácito de su padre. Su vida monacal duró 15 años durante los cuales Martín llevó una vida ejemplar. Gracias a sus grandes dotes intelectuales le ayudaron a hacer una brillante carrera en los Agustinos dedicándose a la enseñanza de ética aristotélica a los novicios.
En 1509 fue requerido por el Vicario General del la orden en Alemania Joham von Staupitz para trabajar como profesor en la recién fundad Universidad de Wittenberg por el Elector Federico el Sabio de Sajonia. Pero poco más tarde volvería a Erfurt a petición del prior de su convento para ocupar la Cátedra de Teología. Los planes de reforma propuestos por el vicario Staupitz no agradaron a los miembros del convento de Erfurt, por lo que decidieron enviarlo a Roma a entrevistarse con el Prior General.
Acompañado por otro monje llegó a la capital de la Cristiandad. En esta época el Papa era Julio II el Terrible cuyo único propósito era unificar Italia. La visita a Roma impactó profundamente a Lutero. La relajada moral de la ciudad y el negocio que la Iglesia sacaba de las indulgencias y las visitas a las reliquias caló hondo en el Reformador y comenzará a constituir la basa de el futuro proyecto reformador. La misión para la que había sido enviado fracasó ya que el Prior General no coincidía con las peticiones de los monjes de Erfurt. Lutero abandonó las protestas de sus hermanos, por lo que fue recompensado por el vicario con un cargo de profesor en la Universidad de Wittenberg. Aquí continuaría sus estudios convirtiéndose en Doctor en Teología.
Este nuevo título supone un paso clave en el proceso reformador ya que para Lutero la obtención de este título lo convertía en un experto en el estudio de las Sagradas Escrituras otorgándole un grado de autoridad equiparable a la de un obispo.
A principios de 1517 Johan Tetzel, fraile dominico, comenzó a predicar en Alemania una indulgencia plenaria que serviría para recaudar fondos para la construcción de la nueva basílica vaticana. A pesar de la prohibición existente decretada por Federico el Sabio Tetzel llegó a Wittenberg a mediados de año y empezó a predicare dicha indulgencia. Esto irritó particularmente a Lutero que contemplaba impotente como sus conciudadanos invertían sus únicos ahorros en las arcas pontificias. Por esta razón decidió intervenir con su popular escrito conocido como las 95 Tesis. Este escrito estaba adjuntado a una carta que Lutero envió al arzobispo Alberto de Brandenburgo. La tradición dice que fueron colgadas en la puerta de la catedral de Wittenberg. Mientras esperaba la respuesta del arzobispo su escrito se filtró y fue publicado de tal forma que en poco tiempo se extendió por toda Alemania. El impacto fue muy grande y pronto comenzaron a surgir seguidores y detractores. Cuando sus detractores contestaron a sus tesis con otro escrito estalló el conflicto.
La obra de Lutero se consideró herética y fue requerido a presentarse en el Vaticano. Lutero se negó a ir a Roma pero accedió a entrevistarse con el cardenal Tomás de Vio Cayetano en el palacio de Jacobo Fugger en Augsburgo. La entrevista resultó infructuosa y tras tres días de discusiones sin posibilidad de acuerdo Lutero huyó de la ciudad temiendo ser detenido. El cardenal instó a Federico el Sabio a que resolviera el problema de Lutero pero este declinó la petición.
En este momento el problema luterano pasó a un segundo plano ya que se estaba produciendo un acontecimiento muy importante, la elección del nuevo emperador de Sacro Imperio Romano Germánico. Los enviados papales entablaron cordiales relaciones con Lutero e incluso el Papa le envió una carta conciliadora.
La influencia de Johann Maier von Eck, principal rival de Lutero convenció ala Curia de que las doctrinas de Lutero eran totalmente heréticas. En 1520 el Papa firmó una bula de excomunión denominada “ Exurge Domine” . Con los primero rumores de la aparición de esta bula el número de personalidades importantes que apoyaban a Lutero creció enormemente.
En esta época Lutero escribió su primera obra violenta “ Sobre el Papado de Roma”. En ella Lutero se preguntaba acerca del derecho de ejercer su autoridad que tiene la jerarquía eclesiástica. A esta obra le siguieron otras muy importantes que constituyeron la base de la doctrina de la Reforma, “A la nobleza cristiana de la nación alemana” y “Preludio en el cautiverio babilónico de la Iglesia” publicada en octubre de 1520. Al margen de estos libros agresivos Lutero escribirá otro libro mas relajado como es “La libertad del cristiano”.
A finales de este año Lutero comenzó a redactar una carta en la que se mostraba obediente al Papa sin dejar de criticar a la Curia. Pero en estos momentos fue cuando Eck llegó a Alemania con la bula de excomunión. Ante estos acontecimientos la reacción del Reformador fue devastadora. Escribió “Contra la bula execrable del Anticristo” donde acusaba a Eck y a la Curia. Se mostró respetuoso hacia el Papa pero aún así lo consideró el Anticristo en el caso de que la propuesta de excomunión hubiera salido de él. En este momento la ruptura con Roma se consolida con una quema pública de las bula y los libros del derecho canónico. Esto provocó la publicación en enero de 1521 de una segunda bula llamada “Decet Romanum Pontificem” en ella Lutero era declarado hereje contumaz y excomulgado. Esta bula adquiría un carácter peligroso para Lutero .Federico el Sabio salió en defensa del Reformador pidiendo que Lutero fuera escuchado antes de ser condenado y por ello se decidió que fuera escuchado en la Dieta de Worms.
La Dieta fue celebrada el 17 de abril. En ella Lutero declaró que no se retractará de aquellos que había escrito en sus obras. Pocos días después, Lutero abandonó Worms y en el camino fue interceptado por los hombres del Duque Federico de Sajonia y confinado al castillo de Wartburg por su propia seguridad. Lo sucedido en Worms tuvo consecuencias políticas importantes.
En Wartburg pasaría diez meses en los que cuales se dedicó a escribir con intensidad, sobre temas variados de crítica a la Iglesia y de reivindicación de los derechos del pueblo alemán. Es destacable la traducción de la Biblia empezando con el Nuevo Testamento hasta 1534 cuando completará la traducción. A mediados de 1522 deberá salir de su refugio a petición expresa de las autoridades civiles de Wittenberg para que pusiera orden en el caos que se había generado a consecuencia de la aplicación de sus doctrinas a manos de Karlstadt. Se vio implicado dentro de las revueltas campesinas producidas en 1524 lideradas por Munzer ocasionando malas consecuencias para la Reforma.
Un año después Lutero volvía a provocar el escándalo anunciando su compromiso matrimonial con Catalina von Bora. El 17 de junio de 1525 contrajo nupcias con ella, provocando un gran escándalo y recibiendo críticas de todos los frentes. Con ella tuvo seis hijos.
Continuó dando clases en la Universidad de Wittenberg mientas los compaginaba con la administración del culto en el templo hasta que su salud se lo impidió. Desde 1536 se vio aquejado de múltiples dolencias.
Al final de su vida tuvo lugar un hecho muy importante el Concilio de Trento a finales de 1545, realizado por el Papa para solucionar los problemas de la Iglesia. Los reformistas fueron convocados pero se negaron a asistir. A pesar de que este acontecimiento fue muy deseado por Lutero observó como no reportó grandes cambios. En ese momento Lutero acudirá en la ayuda de los condes de Mansfield para dirimir unas cuestiones de propiedad y el 28 de febrero de 1546 morirá en Eisleben.