El Renacimiento es un periodo cultural surgido en Europa Occidental entre los siglo XV y XVI que, a su vez, coincidió con el periodo de transición de la Edad Media a la Edad Moderna. Así pues las características del Renacimiento serían:
- Una “vuelta a la antigüedad”: Surgieron de nuevo las formas arquitectónicas clásicas y sus elementos simbólicos.
- Una nueva “relación con la naturaleza” unida al inicio de una concepción más realista de la ciencia y las matemáticas, que ayudarán a crear los ideales de “belleza”.
- El hombre como medida de todas las cosas: La figura humana será el centro de interés del artista que se preocupará del estudio de la anatomía humana y su expresión.
- El mecenazgo: A partir de este momento serán las clases altas las que patrocinen a los artistas y encarguen las obras, por lo que el arte pasará a ser símbolo de prestigio.
Cronológicamente el Renacimiento en el sur de Europa comprende dos periodos: el Quattrocento (s. XV) y el Cinquecento (s.XVI), además del movimiento manierista del siglo XVI. Sin embargo, en el norte de Europa y más concretamente en la ciudad que tratamos en este blog, Copenhague, esta cronología será algo más tardía. La arquitectura renacentista danesa tuvo su mayor auge en los reinados de Frederick II (1559-1588) y de Christian IV (1588-1648), quienes iniciaron numerosos proyectos arquitectónicos basados en la arquitectura renacentista.
El rey Christian IV (1588-1648)
Así pues, fueron los nobles los que dieron auge a las diversas formas de expresión artística del Renacimiento.