Escuelas y autores importantes en el Renacimiento francés (II)

Por Miguel Ángel García Arocas.

Retratistas

Jean Clouet

Jean (o Janet) Clouet (1480 – 1541), fue un miniaturista y pintor que desarrolló su obra en Francia durante el Renacimiento. Fue el padre de François Clouet.

Retrato de Margarita. Alrededor de 1530.
Retrato de Margarita. Alrededor de 1530.

Clouet nació, con seguridad, en Bruselas. La primera vez que se menciona al artista en la corte francesa está documentada en 1516, en el segundo año del reinado de Francisco I. Al parecer, su verdadero nombre era Clowet, pero afrancesó su nombre tras su estancia durante varios años en Tours. En 1529 está documentada su presencia en París. Su hermano, conocido como Clouet de Navarra, estuvo al servicio de Margarita de Angulema, hermana de Francisco I.

Jean Clouet pintó el retrato del conocido científico Oronce Finé en 1530, cuando el retratado tenía treinta y seis años. Lamentablemente la obra ha desaparecido. Sin embargo, el retrato más famoso del pintor es el que realizó del monarca y que se puede contemplar en el Louvre.

François Clouet

1510 – 1572. Aunque se conoce muy poco de su vida y de su obra, se sabe que sucedió a su padre, Jean Clouet, como pintor oficial de la corte. Es reconocida su maestría en el uso del lápiz, que heredó de su padre, la cual le sirvió para captar con gran habilidad la carga psicológica de los personajes que retrató.

Sus trabajos para Francisco I no están documentados antes de los funerales de este último, que estuvieron organizados por el propio Clouet. Tan sólo firmó dos cuadros: el Retrato del Boticatio Pierre Quthe (1562, Louvre, París) y Dama en el baño (c. 1570, Cook Collection, Richmond).

Sin embargo, realizó los retratos oficiales de la corte, como los de Enrique II, Carlos IX o Margarita de Valois. Se le atribuyen unos 50 dibujos, pero hay que considerar que, en general, los trabajos artísticos de esa época eran sobre todo el resultado de un trabajo en equipo.

En el caso de Clouet, su taller estaba particularmente dedicado a la producción de series de retratos, objetos muy a la moda destinados a la aristocracia.

Claude Corneille de Lyon

Corneille de la Haya o Corneille de Lyon. Nació en La Haya entre 1500 y 1510 y posiblemente murió en Lyon hacia 1575. Realizó obras de técnica refinada, en las que aparecen personajes idealizados, destacándolos sobre fondos verdes o azules.

Debió de aprender el oficio en su ciudad natal o en Amberes, pero desde joven aparece instalado en Lyon (1633). Trabajó para la corte francesa especialmente como retratista, y fue muy cercano a Enrique II, incluso antes de que este monarca llegase al trono. En 1548 fue nombrado pintor del rey, habiendo obtenido la ciudadanía francesa un año antes. La pérdida de su prestigio en la década de 1570 seguramente estuvo relacionada con su adscripción protestante. La única obra con la que se le relaciona en el Museo del Prado es la atribución del retrato “Un caballero”, que se cataloga por primera vez en el inventario de 1746 en el palacio de La Granja dentro de la colección de la reina Isabel de Farnesio.

Jean Bellegambe

Jean Bellegambe o Jehan Bellegambe (o a veces también aparece nombrado como Belgamb o Belganb), nació en Douai hacia 1470 y falleció en Douai entre junio de 1535 y marzo de 1536. Fue un pintor de temas religiosos, trípticos y polípticos, los más importantes de los cuales se conservan actualmente en Douai, Arras, Aix, Lille, San Petersburgo y Chicago. Nada se sabe sobre su formación artística. La primera mención que se conoce de él es en un documento de 1504, que lo menciona como un maestro pintor. Era conocido como el Maestro de los Colores, por la transparencia y la interacción de sus colores. Se le conoce como Jean Bellegambe el Viejo para distinguirlo de sus descendientes, que también se llamaron Jean. Entre sus obras más importantes se encuentran el Tríptico de la Inmaculada Concepción y el Tríptico de Le Cellier.

Jean Cousin El Viejo

Conocido como el Padre o el Viejo (Soucy o Sens, alrededor de 1490/1500- Sens o París, hacia 1560). Tuvo unos comienzos muy modestos, siendo geómetra en Sens, y sólo a partir de 1530 trabajó como pintor. En 1538 estaba en París, formando parte del gremio de pintores. Trabajó haciendo cartones para los fabricantes de tapices y de vidrieras. Cuando Enrique II hizo su entrada en París en 1549, Cousin fue uno de los que contribuyó adornando uno de los arcos de triunfo con una Pandora. El tema se repetirá en el que puede considerarse su cuadro más conocido: Eva prima Pandora. Vasari lo mencionó con elogios en su primera edición de las Vite (1550), lo que demuestra que su fama se había vuelto internacional.

El rapto de Europa. Alrededor de 1550.
El rapto de Europa. Alrededor de 1550.

Hacia el final de su vida, trabajó en un Libro de perspectiva (Livre de perspective), acabado en 1558 y posiblemente publicado hacia el que se considera el año de su muerte, el año 1560. Este libro acabó siendo una especie de manual para los pintores franceses.

Jean Cousin es considerado una de las figuras más importantes del Renacimiento francés. En su estilo influyó principalmente la escuela del Alto Renacimiento italiana, pudiéndose ver en la expresividad y los contornos nítidos de sus figuras. También le influyeron autores de la escuela de Fontainebleau, en particular de Rosso Fiorentino. En lo que se refiere a los grabados, se aprecia que fue influido por los grabadores nórdicos.

Jean Cousin el joven

Jean o Jehan Cousin el Joven («le jeune») (1522-1595). Fue hijo del famoso pintor y escultor Jean Cousin el Viejo. Habiéndose formado para convertirse en artista con su padre, Jean el Joven mostró tanto talento como su padre, y su obra es casi indistinguible, incluso para el experto. Justo antes de su muerte, Jean el Viejo publicó su destacada obra Livre de Perspective en 1560, en que señalaba que su hijo pronto publicaría otro libro titulado Livre de Pourtraicture.

Seguramente, la primera edición de la obra fue 1595 en París por David Leclerc, con grabados por Jean Leclerc, justo después de la muerte de Jean Cousin. El libro es uno de los más famosos sobre el tema de la anatomía artística, y fue impresa de nuevo una y otra vez a finales del siglo XVII. Entre sus obras más importantes destaca El Juicio Final.

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