Las circunstancias del trabajo al llegar al archivo municipal de Muchamiel, fueron favorables, es decir, el personal del archivo se mostró solicito a la hora de entregar la información.

Al principio la archivera del depósito se mostró reticente a la hora de permitir fotografías de los documentos, por lo que tuvo que consultar con el jefe de departamento del Ayuntamiento de Muchamiel.

La información consecuente, tardó varios días en facilitarse, así como la permisividad a la hora de tomar fotos. Tras esto los libros de actas de 1939 y 1940 nos fueron entregados personalmente de mano de la archivera del depósito, sin problema alguno. Posteriormente Álvaro Fernández y Sergio Rodrigo se repartieron los libros de actas de 1939 y 1940 correspondientemente.

En primera instancia Sergio Rodrigo acabó el trabajo antes, mientras que Álvaro Fernández tuvo que solicitar la información por segunda vez. En esta segunda la entrega de la información se transmitió sin problema alguno, así como la posibilidad de hacer fotografías.