Basílica de Santa María (interior).

 

Resulta sumamente cautivador e impresionante el interior de la basílica de Santa María, esto  se debe en gran medida a las obras escultóricas de artistas  de la talla de Wit Stwosz y Andrzej Radwańsk.

Observamos como cobran protagonismo las vidrieras que además de ser decorativas aportan gran luz al interior de la basílica. El empleo de las vidrieras se da en el arte Gótico, dejando atrás la atmósfera lúgubre de las Iglesias Iglesias glesias románicas.

Sobrecoge la belleza del interior de la basílica, pues presenta elementos decorativos y arquitectónicos de gran calidad como sus arcos puntiagudos, el retablo de madera  y el cristo crucificado labrado en arenisca, obras de Wit Stwosz.