Lo que más me sorprende de Joanna en este último mes no es que no deje de hablar desde que se levanta hasta que se acuesta; ni que la adquisición del lenguaje sea cada vez más rápida y sorprendente; o que no la entendamos en ocasiones porque va más rápido que nosotros en su aprendizaje, sino su evolución cognitiva en general. Joanna con 21 meses es capaz de imaginar cosas, de mentir, de negociar, de hacer algo parecido a guardar un secreto. Desde un punto de vista fonético, es interesante analizar sus enfados lingüísticos. Algunas veces dice ‘NOOO’, cuando repites algo que ella ha dicho y no es correcto. Compartimos un mismo léxico pero con apariencia fonética diferente.