Joanneta ha hecho una innovación fonética en las dos últimas semanas. Ha incorporado a su fonética los finales consonánticos del catalán y los plurales del castellano. Pronuncia claramente los plurales con una [s] muy perceptible, incluso exagerada (como suelen pronunciarla los ‘pijos’); en cuanto al catalán, pronuncia las [t] finales de forma perfecta, pero confunde las [k] que pasan a [t] y las [ʧ] que pasan a [s] o a una cosa intermedia (como una especie de ‘s’ palatalizada). La [θ] pasa a una [s] o [ʦ]. Cuando los finales consonánticos añaden el plural, se simplifican: [ga’tes] ‘gatets’; [kolorin] ‘colorins’ [gros] ‘grocs’ [‘bets], ‘verts’; [uis] ‘ulls’. En realidad no es que las consonantes (t, k, etc.) no suenen en absoluto, sino que son casi mudas.