Esta foto fue tomada en la Calle Diego Fernando Montané y muestra la diferencia entre un cartel bien impreso anunciando clases de Aleman con otros dos carteles en los que se ofrece impartir clases de Biología y Quimica. A pesar de que los anunciantes de los pequeños carteles disponen de una mejor cualificación formativa y laboral (según muestran), la presentación es peor, lo cual influye a la hora de captar la atención y de ser elegidos frente a otros.
Lo que más me llama la atención es como la diferencia entre una apariencia y otra puede ser tan importante y hacer que discrimines un cartel y des valor a otro, mientras que su contenido real es opuestamente importante.
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