Los jardines botánicos, desde sus inicios en Europa en el siglo XVI, han cumplido funciones de demostración y estudio de los recursos vegetales, teniendo una estrecha relación con la medicina y la farmacia. De hecho, los primeros jardines botánicos fueron fundaciones universitarias cuyo propósito primordial era abastecer de materia prima a los médicos y farmaceutas de la época.
El pirmer resultado de esta actividad botánica del siglo XVI, que fue mayor en Alemania, Holanda, en el sur de Francia y en Italia, fue aumentar el número de plantas individuales conocidas. Se hicieron listas de la flora y fauna locales por dinstintas regiones. Se crearon jardines botánicos, que desde hace mucho tiempo habían existido en los monasterios y que desde el siglo XIV habían sido plantados por algunas escuelas de Medicina, en ciudades universitarias como Padua (1545), Bolonia (1576), y Leyden (1577). Los dos últimos estaban dirigidos, respectivamente, por Aldrovandi y Cesalpino y por De I´Ecluse. Más tarde se crearon otros en Oxford (1622), París (1636) y otros lugares. La práctica de conservar plantas secas, jardines secos, que se inició en Italia, permitió que la Botáni9ca pudiera continuar durante los meses de invierno. Al mismo tiempo, el botánico portugués García de Otra publicó un libro sobre las plantas hindúes de Goa (1536) y el español Nicolás Monardes lasx primeras descripciones del tabaco y otras plantas americanas.
Deja un comentario