La bibliografía revisada nos dice que fue un hombre muy religioso. Llegó a creer que estaba predestinado y tocado por la divina providencia.
En su juventud, Cristóbal Colón era un gran conversador, poseía una gran capacidad de seducción que le hacía cautivar a sus oyentes.
En el aspecto profesional, fue un gran navegante, pasó de grumete a Amirante del Mar Oceáno. Una trayectoria veraderamente espectacular.
En el terreno familiar, era una persona muy allegada a los suyos.En su vida hubo 2 mujeres: la portuguesa Felipa Monhiz y la cordobesa Beatriz. Dió constantes muestras de afecto a sus hijos, Diego y Hernando.
La etapa portuguesa fue decisiva en su vida pues allí se empapó del ambiente de las grandes navegaciones de los lusos y allí gestó su gran plan: encontrar las Indias Orientales navegando siempre hacia Occcidente.
En la última etapa de su vida, sufre enfermedades tropicales, ataques de gota y reuma. Todo ello ayudaría a entender que se comportara como una persona iracunda.
Podemos concluir diciendo respecto a la personalidad del peronaje protagonista de este blog que se trataba de un hombre de carácter firme y decidido, y un agudo observador, experto en asuntos de la mar. Una persona capaz de afrontar los mayores riesgos con tal de ver cumplido su sueño.