A la espera de la próxima campaña de excavaciones arqueológicas, prevista para el verano de 2016, el equipo MBC desarrolla actualmente la fase de estudio de materiales provenientes de la última actuación que concluyó el pasado mes de mayo. En este momento los trabajos están focalizados en tres ámbitos, por un lado, el dibujo y fotografiado de los materiales exhumados (principalmente cerámicos y metálicos), que fomaron parte tanto los ajuares de los enterramientos como de los rituales funerarios, en los laboratorios del Conjunto Arqueológico.
Por otra parte, en la misma sede, se están realizando las labores de inventario y catalogación de todas las piezas, para tratar de recabar toda la información cronológica y contextual, que es fundamental en esta fase de desarrollo del proyecto.
Finalmente, y bajo la coordinación de la osteoarqueóloga María Paz de Miguel Ibáñez (UA), se están llevando a cabo en el laboratorio de Arqueología de la Universidad de Alicante las micro-excavaciones de los interiores de las urnas cinerarias. Se trata de un método de trabajo muy cuidado y lento, ya que cada deposición es tratada como un pequeño yacimiento en sí mismo. La excavación se realiza dividiendo el espacio en cuadrantes y por niveles artificiales que se documentan fotográficamente para después ser montados en 3-D a través de Photoscan.
En breve pues comenzará el estudio forense de los restos humanos recuperados. En todas las tareas, junto al equipo de investigadores del proyecto MBC, participan becarios de investigación y alumnos del Grado de Historia y del Máster de Arqueología de la Universidad de Alicante que realizan prácticas y que se forman en el atractivo campo de la arqueología funeraria.
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