Como hemos visto anteriormente, las estructuras de regadío suponen un punto de inflexión en el desarrollo económico de una población de a priori tienen un terreno de secano o debe aprovechar los marjales como es el caso.
Los marjales (territorios pantanosos) suponen un escollo a la hora de llevar a cabo una producción agrícola pese a la existencia de agua puesto que existen barreras geográficas obvias. Por ello se llevó a cabo un proceso de secado y canalizaciones aumentando el terreno cultivable (ganándoselo a la naturaleza) así como el aprovechamiento de los recursos hídricos. Esta labor se llevó a cabo de forma generalizada en la vega baja y el litoral y el sur del reino de Valencia. Este proceso se llevó a cabo en las villas de Orihuela y Almoradí.
La segregación de Almoradí del dilatado término de Orihuela y su constitución en municipio responde al desarrollo económico que este lugar adquiere, desde mediado el siglo XVI. La emancipación se pudo llevar a cabo gracias a la pujanza económica de Almoradí debido a la agricultura.
El regadío de Almoradí está ya documentado en el repartimiento de tierras realizado después de la conquista cristiana, obtenemos información que aluden directamente a la Acequia Mayor de Alquibla que tiene su origen en el Azud de las norias, que supuso la primera presa de riego existente en el Segura para dotar a la huerta oriolana ( y por ende de Almoradí) y que desembocaba en el marjal previo al mar. También data de época medieval el cauce de riego conocido con el nombre de Acequia Vieja de Almoradí, que tiene su inicio en el Azud de Almoradí, ubicado en el interior de la población de Orihuela.
No obstante, con estas canalizaciones, el regadío solo cubría en Almordí una mínima porción de sus tierras, permaneciendo la restante superficie agrícola con aprovechamientos de secano y los que proporcionaban los terrenos pantanosos. Será en la segunda mitad del XVI, cuando se haga efectiva la ampliación del terreno regado mediante la creación de una nueva obra hidráulica en el Segura, de la que partieron otras acequias para distribuir las aguas por gravedad. Se trata de la construcción del Azud de Alfeitamí.
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