LA IDOLATRÍA DE LA SEGUNDA EDAD Y SU ORIGEN
No tuvieron más dioses que al sol, al cual adoraron por sus excelencias y beneficios naturales.
Además de adorar al sol por dios visible, a quien ofrecieron sacrificios e hicieron grandes fiestas, los reyes Incas y sus amautas, que eran los filósofos, rastrearon con lumbre natural al verdadero sumo Dios y Señor Nuestro, que crió el cielo y la tierra. Pachacámac quiere decir el que da ánima al mundo universo, y en toda su propia y entera significación quiere decir el que hace con el universo lo que el ánima con el cuerpo.
Al demonio le llamaron Zúpay, que quiere decir diablo, y para nombrarle escupían primero en señal de maldición y abominación.