Literatura

Literatura

El periodo de tiempo comprendido por el renacimiento y el barroco coincide, casi en su totalidad, con uno de los más florecientes momentos para el arte y la literatura en la Península Ibérica, el denominado Siglo de Oro español.

En este sentido nos encontramos con una Sevilla en pleno auge como ciudad y centro de cultura y arte, favorecido, sobre todo, por el comercio de América, gestionado únicamente desde este puerto.  De esta forma surgen en Sevilla diversas obras de renombre, de autores sevillanos o peninsulares, quienes acuden a la ciudad en busca de inspiración, dejándola reflejada en sus obras.

Miguel de Cervantes Saavedra. Por todos conocido, es, probablemente, el autor de mayor renombre de su época. A lo largo de su vida realizó diversas visitas y pasos por Sevilla, muchos de ellos vinculados con su labor como “comisario real de abastos”, cuya función era aprovisionar a la Armada Invencible. Esta labor le valió la excomunión en dos ocasiones, por confiscar grano a la Iglesia y finalmente su ingreso en la Cárcel Real, acusado de apropiarse del grano recaudado. Es en este año (1605) cuando, según el prólogo de la obra, comienza a tomar forma El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. Años más tarde redactaría las conocidas como Novelas Ejemplares, algunas de las cuales se encuentran ambientadas en la ciudad de Sevilla.

 

Mateo Alemán. Un autor sevillano conocido por su obra más celebre, La vida del pícaro Guzmán de Alfarache (o El Pícaro). Se trata de una obra que consolidó las pautas de la novela picaresca en toda Europa, ya que fue muy extendida y traducida, llegando a convertirse en el primer “Best Seller” de la historia. Para muchos esta obra es la primera gran novela moderna, adelantándose al famoso don Quijote de la Mancha, en el que tendría una gran influencia. En ambos casos nos encontramos con una visión mucho más pesimista, y realista, del mundo que la expuesta en obras del período anterior.

Tirso de Molina. No podíamos acabar este apartado sin mencionar a este sacerdote mercedario y destacado poeta y dramaturgo de la época. A este autor se atribuye la creación del mítico Don Juan, un seductor valiente y osado, incluso temerario, que no respeta ninguna ley divina o humana. En este sentido nos encontramos con su obra El burlador de Sevilla, donde aparece un noble sevillano, Don Juan, alterador de la Sociedad y el orden establecido, incurriendo en la deshonra de cuantas mujeres se le ponen delante, finalmente recibe su merecido castigo y acaba encontrando la muerte a manos del padre de una de sus víctimas.