Con dos años y cuatro días Joanneta es capaz de recitar una poesía de 37 palabras sin ningún error. Se sabe, además, tres villancicos. Aunque en los villancicos se equivoca un poco. ¿No es sorprendente? A mí al menos me lo parece. Su madre la llevó el otro día a la revisión de los dos años a la pediatra y esta le dijo: “Dice frases de dos o tres palabras? ¿dice no y lo dice con sentido?”. Hace meses que Joanneta hace esto. Sus frases son largas y complejas. Como siempre la ciencia pediátrica me sorprende. Le volvió a preguntar: “¿hace torres con tres o cuatro cubos? ¿corre? ¿juega sola?” Los pediatras tienen al parecer obsesión por los cubos. Una característica llamativa de su lenguaje actual es el uso de verbos en valenciano con finales castellanos. Por ejemplo: “Arribo” por “arribe”, “menjo” por “menge”.