En mayo de 2007 Rumanía y Bulgaria ingresaron, como dice la portada, por la puerta de atrás. Dos años antes entró un grupo de 10 países, pero rumanos y búlgaros, al no estar tan avanzados como estos, se quedaron en la puerta de espera.
Además, algunos gobiernos como el español aplicaron una moratoria de dos años para la libre circulación de trabajadores búlgaros y rumanos. Es como decirles que les admitimos en el club, pero que estarán dos años a prueba.
La portada es del número 11 de la revista francesa Journal Europa.