Categories
Curiosidades

Padrenuestro de Gante

El invierno de 1572 fue duro y una helada tardía destruyó frutales y cultivos. Sin embargo, los azares del clima no eran nada comparados con los problemas creados por la extensión de la resistencia al diezmo. Si tenían que pagar un impuesto por sus artículos, decían los comerciantes, mejor era cerrar las tiendas. La gente se quedaba sin trabajo y el número de indigentes aumentaba.

El problema empeoró con la crisis que en aquellos meses sufrió la industria textil. Las autoridades recurrieron a la caridad para evitar los desórdenes. Los problemas tenían causas diversas, pero el resentimiento solía centrarse en el diezmo.

Enfrentado al equivalente de una huelga general en contra de sus propuestas, el duque de Alba estaba furioso. En febrero de 1572, informó al rey de que había procedido con moderación. Le dijo:

“De momento caminaré por este camino de blandura mientras me hallare bien, cuando no, tomaré el otro.”

En el mes de marzo, en plena crisis, los ciudadanos de Gante encontraron dispersos por las calles de la ciudad ejemplares del “Padrenuestro de Gante”, dirigido contra Alba:

Diablo nuestro que estás en Bruselas,

maldito sea tu nombre

así en el cielo como en el infierno.

Que este Diablo se marche muy pronto

y con él su Tribunal, falso y sanguinario,

que a diario practica el asesinato y la rapiña;

y a los perros rabiosos venidos de España

devuélvelos al Demonio, su padre. Amén.