Categories
personas

Le chat noir

WP_20150220_002

Como en Montmatre, también hay gatos emblemáticos en la UA.

Todas las mañanas, puntual a su cita acude. Antes nos cruzábamos con él entre los árboles y nos miraba interrogante, andaba a nuestro lado un rato olfateando el aire para descubrir el contenido de nuestros almuerzos. Finalmente el gato negro volvía a su rincón.

Nunca me han gustado los gatos negros, recuerdo el tatarabuelo de este que años atrás nos rondó antes de presentar la instancia de la oposición. Lo rodeamos, ¡menudo mal fario! Después en Inglaterra, me contaban que allí son indicio de buena suerte. Con el tiempo intento analizar las supersticiones, la antropología ayuda, pero como ser humano defectuoso que soy, me voy creando otras propias.

Pero desde hace tiempo, al gato negro de la EPSa le saludamos por la mañana. Y desde hace menos tiempo hemos visto a un chico, que indiscretamente es esperado por el gato. Todas las mañanas cruzan la carretera y se van en amistoso silencio hasta un rincón donde le da su desayuno. Si hay huelga o algún día falta, el gato -ya sabéis cómo son- le pone falta.

Sabemos quién es el chico, él sabe que sabemos que es él a quien espera el gato. Todos sabemos nuestro secreto y si nos cruzamos por el campus hacemos como que no nos conocemos, la discreción ante todo.

Espero no hacerle una faena contando esto, por eso lo publico a final de curso, para que una vez acabado el curso- no se sienta observado.