“LA OLA” es, en resumidas cuentas, una muy buena película que recomiendo y está basada en hechos reales.
La película tiene como escenario material (marco/ escenario) un colegio en el cual se realiza una semana cultural en la que los alumnos deben matricularse en una serie de talleres. Se ofertan dos talleres antagónicos entre sí, como son la autocracia y la autarquía. Concretamente un profesor con creencias anarquistas está dispuesto a impartir el taller sobre la autarquía, pero no le es posible al haberle sido asignado dicho taller a un veterano profesor, cuyas “pintas” no parecían casar demasiado con los conceptos iban a impartir sobre la autarquía. Encajaba más impartiendo el taller de autocracia, aunque temas a parte al respecto de las apariencias y los juicios superficiales por las formas de vestimenta, éste imparte dicho taller por lo que el otro profesor se ve obligado a impartir el taller de la autocracia en contra de sus principios, o lo que creía que eran en verdad sus principios.
Como se viene diciendo, el profesor se ve forzado a impartir un seminario sobre la autarquía y la dictadura, muy a su pesar al ser contrario a sus creencias. Que mejor para afirmarse uno en sus ideales que conocer desde dentro a aquello de lo que te opones. Es por ello, que al fin acepta (todo sea dicho, casi por obligación) llevar a cabo dicho taller, pero ante su disconformidad, el taller lo va perpetrar de forma muy peculiar.
Con el fin de explicar los significados, orígenes y demás conceptos en torno a dicha ideología establece como la presión de un grupo social potente puede desembocar en el fascismo y, para ello, recurre a un experimento con los propios alumnos, y en donde él también se ve inmiscuido. El experimento al que recurre es crear una asociación partiendo de los “aspectos positivos” de dicha ideología. El problema, y el hilo de la película, será que lo que en un principio sólo iba a ser un trabajo dentro de unos talleres empieza a tomar vida y forma fuera de ellos.
En general, podíamos hablar de una película didáctica en la que el director intenta que el espectador reflexione sobre la importancia de una ideología, sobre los fascismos, las tendencias autoritarias y demás aspectos.