En abril de 1561 la expedición llegó a un pueblo pequeño de indígenas entre los ríos Purús y Negro lo que encontraron en este pueblo contrastaba mucho con las semanas previas en que los suministro de alimentos habían disminuida casi hasta el punto de desaparecer. En el pueblo las indígenas les preparaban pavo, pato, pescado y tortugas. Siquiera tomaron una comida de cerdo salvaje. Sin embargo el ambiente contento no duró mucho tiempo.
El pueblo se divide en dos lados, en un lado Don Fernando se queda con sus amigos y, al otro lado, Aguirre se quedan con suyos. Una noche Don Fernando hizo la decisión convocar un reunión de sus amigos. Aguirre se sintió amenazada por eso y, de repente la matanza empezó. El primero en morir fue un hombre que ha mandado que se enviaron regalos a Doña Inés. Segundo en morir fue la misma Doña Inés, se apuñala hasta el muerto por un teniente portugués de Aguirre. Por fin después de algunos asesinatos mas de los leal a Don Fernando, el “general” sí mismo se mató. Murió rodeado por sus últimos ocho amigos en la expedición, el instrumento de su muerte fue un arcabuz.
Por este serie de asesinos el pueblo indígenas, a partir de entonces, se conocía como el pueblo de la matanza. Con Don Fernando muerto, Aguirre estaba listo ascender a poder.