Se va a dar una circunstancia especial que implicará la vuelta a la antigua coexistencia que se había dado en la Península con la convivencia de las tres culturas. Mientras el Islam fue la religión predominante en estos territorios, hubo la presencia de de un gran contingente de judíos que llegaron exiliados por las persecuciones de 1391 y la expulsión de 1492.
A partir de 1505-1509, judíos y musulmanes cambian su destino, de ser los grupos dominantes a pasan a ser grupos dominados, abandonando las plazas conquistadas por los cristianos, si bien podemos decir que Orán se convierte en lo que había sido un germen y una posibilidad desechada para la Península, que una parte de la monarquía Hispana tuviera un carácter pluriconfesional.
La composición de estos individuos atendiendo a su confesión religiosa la podíamos dividir entre:
— Dentro de los musulmanes se dividirían entre moros de paz, moros de guerra, moros mostrencos, negros y moriscos.
— En cuanto a los cristianos, tendríamos a los familiares de la guarnición, aquellos que se llegaron para dedicarse a tareas de artesanía, mercaderes y comerciantes. Los desterrados, los renegados musulmanes. No hay que olvidar a todo el estamento eclesiástico, con el clero regular y secular, así como a la Inquisición.
— Los judíos residentes en Orán gozaron de cierta permisividad religiosa por parte de la monarquía hispana que no disfrutaron los judíos peninsulares.