Es una práctica de lo más común: estudiantes que salen de casa, a veces incluso de su pueblo, ciudad, país natal y se meten en un piso con otr@s estudiantes.
Y es que, más de una vez hemos oído la odisea que es compartir piso, es cierto, la convivencia es toda una aventura: costumbres raras, manías, situaciones típicas (alimentos con más moho que una muestra de cultivo biológico, acumulamiento de bolsas de basura porque a nadie le toca tirarlas, sufrir una inundación porque se ha estropeado la lavadora o el lavavajillas, formar la propia Torre de Babel en la pila de tu cocina porque a nadie le apetece o nadie tiene tiempo de ponerse a fregar su servicio…). Pero la convivencia tiene muchísimos momentos divertidos, ¿qué sería de ella sin los chismorreos, las múltiples situaciones graciosas, las risas nocturnas?
Tus compañeros de piso forman parte de tu vida y son importantes en ella. Por ello, en lo bueno y en lo malo, compartir piso es toda una “Odisea”… Parecida a la vuelta a casa del héroe griego Odiseo tras la Guerra de Troya.
Calle Médico Pascual Pérez 44-46, Sant Joan d’Alacant 2/12/13
