Este es el quinto año en el que se lleva a cabo la experiencia de impartición de la asignatura Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación en la enseñanza de segundas lenguas / lenguas extranjeras en modalidad B-Learning o semipresencial.
Una de las actividades de la asignatura es escribir un diario de aprendizaje que contemple la reflexión personal sobre el proceso semipresencial.
A lo largo del curso se deberán escribir cuatro entradas tras finalizar los temas 1, 3, 5 y 7.
A continuación. tienes un ejemplo de esquema de diario de aprendizaje, puedes seguirlo o crear el tuyo propio.
FECHA DE ESCRITURA:
DESARROLLO: (contenidos trabajados, reacciones, reflexiones, problemas,…)
Puedes leer los diarios de aprendizaje de los cursos académicos 2008-2009 y 2009-2010, 2010-2011, 2011-2012.
2a entrada:
Buenas tardes a todos/as,
Como he mencionado en mi primera entrada, anteriormente no tenía experiencia en este tipo de enseñanza/aprendizaje y, por eso, necesitaba un tiempo para poder acostumbrarme a ello. Ahora, como ya he encontrado una manera eficaz de hacer mis trabajos, soy más consciente de las ventajas que ofrece la docencia semipresencial ya que hay por ejemplo más flexibilidad tanto para los alumnos como para el profesor. No obstante, y según mi opinion, sigue existiendo la desventaja que es el tipo de enseñanza más impersonal y cuesta un mayor trabajo por parte del profesor.
Por lo tanto, puedo concluir que mis primeras impresiones no han cambiado, la enseñanza semipresencial tiene sus puntos fuertes y débiles pero, y como bien han dicho mis compañeros anteriormente, por lo general aporta más ventajas en comparación con la modalidad presencial.
Un saludo,
Nienke Terluin
2ª entrada
Comentar que personalmente y después de haber realizado las actividades propuestas en esta asignatura, me ha gustado la modalidad semipresencial, quizás por el hecho de que me gusta trabajar desde casa, a mi ritmo e ir aprendiendo progresivamente. Sigo manteniendo una actitud positiva ante este tipo de enseñanza/aprendizaje y sigo pensando que cada vez más este tipo de enseñanza va a primar sobre aquella presencial. Sin embargo, creo que es necesario tener un profesor-guía que oriente al alumnado en el trabajo con el uso de ciertas aplicaciones tecnológicas hasta que el alumno se familiarice con ellas. Por otra parte, creo que con este tipo de enseñanza el aprendizaje puede ser mucho más significativo puesto que el alumno participa activamente con la tecnología, elemento que ya forma parte de la vida cotidiana del alumno.
2ª entrada
En mi opinión, como he mencionado en la primera entrada, y pensando en esta experiencia de las clases de Nuevas Tecnologías, las clases no presenciales facilitan el aprendizaje autónomo. Mi opinión sobre las clases no presenciales no ha cambiado mucho; estas clases me han dado la oportunidad de organizarme según mi propio horario y si me surgen algunas dudas las puedo resolver a través de las tutorías docentes que lo hace más fácil y cómodo para nosotros y los profesores también. Además, según esta experiencia, me he fijado que, para mí, no es muy fácil motivarse a la hora de estudiar cada tema, como en las clases presenciales. Asimismo, como algunos de mis compañeros han dicho, el profesor tiene que guiar a los estudiantes y motivarles durante las clases que es algo que falta de las clases no presenciales. Como he mencionado en la primera entrada, cada uno tiene su propio estilo de estudiar por eso creo que la eficacia de las clases no presenciales depende de cada estudiante y su estilo de aprender.
2ª ENTRADA
Debido a mi escasa experiencia en docencia semipresencial me encontraba a la expectativa de comprobar mi propia evolución en la materia. Tenía claro que ambas modalidades, presencial y no presencial, presentan ventajas y desventajas pero quería contrastar mis primeras impresiones con el progreso de mi aprendizaje en la asignatura.
Después de estas primeras semanas de clase puedo decir que he aprendido a trabajar de una manera más autónoma y consciente, ya de alguna manera todos los temas derivaban en otros aspectos interesantes de investigar. También a ser un aprendiente más crítico y a mirar la información “con otros ojos”, a procesarla de otra forma más sistematizada.
Sin tener una opinión del todo formada anteriormente, ahora considero que mis intuiciones sobre la modalidad semipresencial eran correctas y estamos aprovechando de manera muy positiva sus puntos fuertes.
2ª entrada.
Pienso que las clases no presenciales tienen sus ventajas y desventajas. En mi caso, nunca había tenido la ocasión de trabajar de esta manera y sí que ha cambiado bastante mi perspectiva sobre esta modalidad, ya que pensaba que mi aprendizaje sería menor que en clase y ha sido todo lo contrario debido a que al ser un trabajo autónomo se necesita la búsqueda de información no comprendida por uno mismo y pienso que se aprende mejor a encontrar aquella información necesaria y más específica mediante el uso de las tecnologías. Pienso que esta modalidad no presencial es una manera de trabajar muy positiva ya que creo que el alumno puede administrar mejor su trabajo compaginándolo con otras tareas, siendo más ventajoso aún para aquellas personas que trabajan y por ello le impiden poder ir a clase. Por otra parte, es un ahorro de tiempo en clase, ya que al realizar actividades y seguir los temarios en casa, permite que avancemos más rápido en las clases presenciales. Como he dicho estas clases promueven el trabajo autónomo y el aprendizaje por iniciativa propia y también desarrolla distintas formas de comunicación (mediante tutorías, debates, blogs, etc.).
Como desventajas, pienso también que este tipo de sistema no es tan sencillo, sobre todo para los alumnos más jóvenes, ya que requiere un alto nivel de compromiso y responsabilidad como estudiante. También pienso que puede ser una dificultad en el tema pedagógico ya que puede dificultar el aprendizaje del estudiante en aquellos casos en los que no se comprende los contenidos, aunque también es verdad que las tecnologías es un medio de acceso a grandes cantidades de información, siendo esto una gran ventaja, ya que como he dicho, el estudiante se ve obligado a la búsqueda de información por él mismo y no dada ya por el profesor como sería en clase presencial, utilizando así distintos recursos y desarrollando otro método distinto de aprendizaje.
2ª entrada
De acuerdo con mis compañeros, mi opinión respecto a la modalidad semipresencial del tema 1 no ha variado demasiado. Desde un principio se sabía que este tipo de aprendizaje requiere constancia y madurez, aunque es cierto, que al vivirlo en primera persona se ve que no es tan “duro” como se podría imaginar. Siempre que se intente llevar todo al día, no será agobiante para el estudiante.
Durante este periodo, me he dado cuenta que al ser semipresencial se adapta al alumno y su horario, sin embargo, requiere más tiempo que las modalidades presenciales, y eso es algo que hay que tener en cuenta a la hora de hacer un curso semipresencial, hay que disponer de tiempo y saber cómo distribuir el trabajo, ser organizado es algo imprescindible.
Realmente pienso que es algo positivo y un buen “invento”, si se tiene la motivación necesaria para cursar este tipo de modalidades, ya sea semipresenciales u online, cualquier estudiante es adecuado y apto para ello.
Segunda entrada:
A día de hoy, la opinión que reflejé en mi primera entrada sobre el proceso de enseñanza y aprendizaje a distancia no ha variado, en todo caso se ha reforzado todavía más.
Prueba de ello es que en el CFGS de Educación Infantil que estoy cursando este año en modalidad semipresencial, no he logrado superar de manera satisfactoria todas las pruebas de test que he realizado. A diferencia de lo que muchas veces ocurre en la enseñanza presencial (se le suele echar la culpa al profesor porque no entendemos su forma de explicar los contenido), en la enseñanza a distancia, la actuación del alumno es la responsable de su éxito o fracaso en este tipo de enseñanza.
En mi caso, no he sabido gestionar bien el tiempo del que disponía, ya que necesitaba más tiempo para estudiar e interiorizar los nuevos contenidos del que realmente disponía.
La modalidad de examen (test) también ha sido un factor decisivo, ya que debes estudiar un contenido determinado pero con un objetivo distinto, puesto que no se te da la oportunidad de desarrollar por escrito lo que has estudiado…
Con todo lo expuesto, me gustaría destacar que el alumnado de modalidad a distancia, debe aprender a ser organizado; a gestionar el tiempo del que dispone para estudiar, realizar actividades o descansar; debe tener un hábito de estudio ya consolidado, ser constante, muy muy responsable y sobre todo un verdadero aprendiente autónomo.
Un saludo a todos y todas,
Montse
2ª entrada
Mi opinión sobre el aprendizaje semipresencial sigue siendo la misma que tenía al empezar esta asignatura puesto que, antes de cursarla, ya había realizado dos en esta modalidad mientras estudiaba mi licenciatura.
Sigo pensando que el aprendizaje semipresencial es una gran herramienta a disposición de los alumnos que sirve de gran ayuda para llevar a cabo la materia. Gracias a la modalidad semipresencial, podemos matricularnos en asignaturas o cursos que nos dan la libertad de organizarnos el tiempo como mejor se ajuste a nuestras necesidades. Por otro lado, y debido a la constancia y el esfuerzo por parte del alumno a la hora de realizar el trabajo, los conocimientos que se adquieren se fijan más y, por lo tanto, la adquisición de nuevos conceptos es más eficaz.
Sin embargo, esta modalidad presenta un gran inconveniente (o al menos para mí) que es el hecho de tener que ser tan constantes y responsables para poder llevar todo el trabajo al día y no dejar cosas atrasadas. Asimismo, para que los conocimientos se adquieran de una manera eficaz, se requiere un alto grado de compromiso por parte del alumno, compromiso que no siempre es llevado a cabo, provocando así que el aprendizaje no sea tan bueno.
Desde mi punto de vista, la enseñanza semipresencial tiene más ventajas que inconvenientes. Como he dicho antes, esta modalidad ofrece una gran posibilidad para aquellos alumnos que, por cualquier motivo, no puedan asistir regularmente a clase. Además, como ha mencionado Adrián, en la clase de TICS tenemos mucho tiempo para organizarnos y ponernos al día con los trabajos grupales, lo cual nos permite que fuera del aula usemos el tiempo como mejor se adapte a nuestra situación y podamos emplearlo en la lectura de los materiales.
Segunda entrada.
Desarrollo: ¿Han cambiado sus primeras impresiones sobre la docencia semipresencial?
En cierta forma algunas de mis primeras impresiones sobre la docencia semipresencial han cambiado. En un principio pensaba que la independencia que proporciona este tipo de modalidad de E/A podría suponer un gran esfuerzo y que la fuerza de voluntad para llevar a cabo las tareas iba a ser enorme.
Al comienzo de la asignatura creía que enfrentarme por mí sola a la lectura del temario y la realización de las actividades iba a ser una tarea mucho más ardua. Sin embargo, me he dado cuenta de que después de un tiempo me he acostumbrado a organizar y dedicar el tiempo necesario a esta asignatura.
Entiendo que he desarrollado una nueva estrategia de aprendizaje acorde a la modalidad semipresencial. En definitiva, considero que esta modalidad me ha ayudado a fomentar mi autoaprendizaje, a no depender tanto de la presencia y asistencia física de un instructor y a ser más resolutiva e independiente en el proceso de E/A.
En referencia a los diferentes estilos de aprendizaje, es cierto que algunos estudiantes pueden sentirse más cómodos y seguros con la modalidad presencial por diferentes motivos. No obstante, quizás sea realmente beneficioso para éstos enfrentarse a las modalidades semipresencial y virtual para así aprender y desarrollar una nueva capacidad para el aprendizaje independiente y la organización y uso del tiempo.
Uno de los aspectos negativos que sigo encontrando en la modalidad semipresencial/virtual es la ausencia de feedback en algunos casos. Las actividades o tarea final se entregan en forma de dossier o de “producto final”, pero me pregunto si los profesores ofrecen algún tipo de feedback sobre el mismo en este caso. En los cursos presenciales siempre podemos acudir a una tutoría física y comprobar el examen o trabajo entregado con las anotaciones pertinentes. Pero, ¿qué ocurre en los cursos virtuales? ¿Envían los profesores el dossier corregido a los estudiantes?
Por último, mi impresión sobre la ausencia de material al finalizar el curso sigue siendo la misma. Considero de forma muy negativa que no se facilite el material de los cursos semipresenciales/virtuales al finalizar este. ¿No sería posible colgar en algún servicio de alojamiento de archivos como Dropbox todo el contenido del curso para poder descargarlo? Desde aquí me gustaría decir que sería realmente interesante que la profesora considerara la forma de hacernos llegar el contenido de esta asignatura para que, una vez finalizado el curso, podamos acceder a toda la información en futuras consultas.
Ana Pérez
2ª entrada:
Como dije anteriormente mi desconocimiento sobre el aprendizaje semipresencial , no me permitía realizar una valoración crítica. Ahora que ya han pasado los meses y sé como se tiene que trabajar en esta modalidad considero que es peor que la presencial, no solamente porque permite un uso eficaz de tu tiempo sino por la existencias de otros factores de carácter psicológico que entran en juego.
Hoy en día, no sólo hay entrevistas de forma presencial ,sino también de forma telefónica. Según muchos psicólogos debemos vestirnos y prepararnos de la misma manera que si fuese presencial.Por tanto, debemos imbuir este saber en nuestra cabeza. En otras palabras , no por el mero hecho de ser una modalidad online que nos permite estar en casa a la hora de trabajar es mejor.Es un trabajo más disciplinado y más costoso que la enseñanza presencial. Por tanto desde mi punto de vista la enseñanza online es peor porque es más trabajo, pero todo depende de la persona, de su tiempo y de sus posibilidades pero ambas modalidades son provechosas.Quizás una mayor integración de conocimiento como el uso de smartphones favorezca el aprendizaje de este tipo.
Antonio Ventura
Fecha: 10/03/2013
2ª entrada:
En el anterior post hicimos una reflexión sobre las ventajas y desventajas de la docencia semipresencial, y durante estas semanas he podido experimentar algunas ellas. No obstante, mi opinión no ha cambiado respeto a las primeras impresiones de este tipo de docencia, pues ha aportado a esta asignatura más beneficios que limitaciones, como comentaba anteriormente mi compañera María José.
En primer lugar, durante estas semanas he podido trabajar a mi ritmo, pues en todo momento sabemos qué se espera de nosotros y cuándo se han de entregar las tareas. Para ello, he tenido que organizar mi trabajo y mi tiempo para poder ir cumpliendo con las fechas, cosa que no ha sido fácil; en ocasiones solo se contaba, en principio, con el trabajo de esta asignatura y poco a poco iban surgiendo nuevas tareas de entrega a corto plazo de otras, lo me hacía no cumplir con mi plan de trabajo y posponer algunas tareas.
En segundo lugar, otro aspecto que me ha gustado mucho de esta modalidad, es la posibilidad de estar en contacto con la profesora en todo momento vía on-line, puesto que nos ha permitido resolver cualquier duda sin tener que esperar a tener clase presencial.
Por último, puedo decir que estar cursando esta asignatura de forma semipresencial está siendo una buena experiencia con bastantes beneficios pues estamos aprendiendo muchas cosas nuevas sobre las TIC y su aplicación en el aula de idiomas, y además, estamos experimentando una modalidad de enseñanza-aprendizaje, nueva para muchos de nosotros.
2ª entrada
Despúes de algunas semanes de clase, yo no he cambiado mi primera impresión sobre la docencia semipresencial. Estoy de acuerdo con mis compañeros que este tipo de enseñanza deja a los estudiantes aprender en sus propias maneras.Como lo he dicho en la primera reflexión, cada persona tiene una manera de estudiar que parece más adecuada para el o ella. La docencia permite los estudiantes no presentar en la clase que significa ellos tienen más libertad. Pero también los estudiantes no pierden la ayuda del profesor, puesto que hay tutorial del profesor, que puede ayudar solucionar las dificuldades de los alumnos. Aunque esta manera de enseñanza permite más liberdad,los alumnos tienen que ser más responsables.
2ª entrada.
En los días que llevo realizando la asignatura semipresencial, mis impresiones iniciales no han variado y están siendo acordes a lo que esperaba.
Las clases semipresenciales no están siendo inconveniente en mi aprendizaje, incluso me facilitan la labor, puesto que una vez impartida la clase presencial en la que se comienza un nuevo proyecto, resuelvo las dudas y ya puedo organizarme las prioridades, e incluso dispongo de más tiempo porque le sumo todas las horas de desplazamiento que me ahorro y las invierto en la confección de las actividades.
Por otro lado, debo añadir a mis valoraciones del primer día, que este sistema me está ayudando a obtener una visión específica y concreta sobre el proceso de enseñanza/aprendizaje semipresencial, para poder yo aplicar en un futuro ciertas unidades didácticas sin que fracase en el intento.
10/03/2013
2ª entrada:
Como ya indiqué en la primera entrada, los programas semi-presenciales son una buena opción dentro del proceso de enseñanza/aprendizaje. Desde mi punto de vista, la flexibilidad de horarios es un aspecto clave y fundamental dentro de esta modalidad, ya que, en mi caso, me permite combinar mi trabajo con los estudios.
Hasta ahora, sólo había participado en enseñanza presencial y/o virtual, y mi experiencia en la última modalidad no había sido muy positiva. Considero que hay muchos factores que entran en juego para que funcione, tal como la correcta presentación y programación de la información por parte del docente. Durante mi pasada experiencia me sentí perdida y con una sensación negativa de no haber aprendido.
Personalmente, el hecho de combinar el trabajo autónomo por parte del alumno junto con tomas de contacto con el docente cada cierto tiempo es fundamental, por lo que sin duda, volvería a realizar un curso semi-presencial. Los temas están presentados de manera muy clara y visual. En todo momento el alumno sabe qué, cómo y cuándo deberá presentar las tareas a evaluar. El debate favorece la resolución de dudas comunes y las clases presenciales de los jueves consolidan la información aprendida y favorecen el trabajo en grupo.
2ª entrada
Aunque la experiencia hasta ahora ha sido de solo semanas, he podido observar en bastante profundidad la dinámica de una clase semipresencial y creo que mi opinión no ha variado mucho.
Es cierto que me ha resultado muy práctico tener a mi disposición todos los materiales en un mismo lugar y poder acceder a ellos de manera sencilla en cualquier momento. Aunque el material se pueda ver en clase, dispongo de la posibilidad de consultarlo y leerlo tantas veces como sea necesario. Sin embargo, puede resultar algo frustrante no poder abarcar toda la información. Al incluirse numerosas fuentes, recursos, artículos relacionados, etc; a veces me he sentido desbordada por no tener tiempo para leerlo todo y tener que seleccionar aquello que podía resultarme más interesante o provechoso. En este sentido, he podido observar la autonomía y disciplina necesarias para poder adaptarse a la enseñanza semipresencial. Para un estudiante poco acostumbrado a este tipo de clases, puede resultar fácil confiarse y no llevar al día las lecturas o tareas. He de admitir que por falta de hábito, ya que no he cursado asignaturas semipresenciales, no se me hace fácil administrar el tiempo para seguir el calendario.
Además, aunque exista la posibilidad de estar en contacto con la profesora para resolver dudas, sigo sintiéndome más cómoda pudiendo aclarar conceptos o ideas mientras transcurre la clase.
Aunque aquellos estudiantes acostumbrados a la enseñanza tradicional podamos necesitar un periodo más o menos extenso de adaptación, estoy convencida de que las ventajas que ofrece la enseñanza semipresencial lo merecen.
2ª entrada
En mi opinión, y contestando a la pregunta planteada en el tema 5, la respuesta es sí, mis impresiones han cambiado, pero han cambiado a mejor. En esta asignatura se nos da la oportunidad de trabajar a nuestro ritmo, lo cual nos proporciona un poco de espacio y tiempo en este máster frenético. Creo que todos agradecemos la flexibilidad a la hora de entregar trabajos, de realizar ejercicios, etc. Esto es exactamente lo que nos proporciona la modalidad semipresencial, más tiempo (dentro de un periodo determinado) ya sea para realizar las actividades, leerse bien el tema, entre otras. La desventaja principal, que ya comenté en mi anterior entrada, es la responsabilidad que debe tener cada alumno a la hora de ponerse al día con tareas, trabajos y demás. Coincido con Adrián en que esta modalidad precisa de más atención por parte del alumno, y también por parte del profesor, pero compensa con las ventajas que nos ofrece.
Bajo mi punto de vista, la modalidad semipresencial es la enseñanza del futuro, ya que incrementará la responsabilidad del alumno y además proporcionará un aprendizaje autónomo, que es lo que los profesores debemos promover hoy en día en las aulas. En definitiva, esta modalidad de aprendizaje es la más idónea ya que combina ambos aspectos (presencial y virtual), y es lo que conjuntamente el alumno agradece. Por mi parte, y como ya he dicho anteriormente, me siento muy cómoda trabajando de esta forma, y gracias a mi experiencia anterior utilizando este sistema, tengo en cuenta diversos apuntes como las fechas límite, la reflexión personal de cada actividad, etc. Mi visión de la modalidad presencial ha mejorado con respecto a anteriores usos de ella.
2º Entrada
En respuesta a la pregunta planteada, no he cambiado mi forma de pensar sobre la presencialidad o semipresencialidad de la asignatura. Me sigue pareciendo una buena manera de aprender, sobre todo si es en el uso de las TIC.
Pero la problemática se plantea es a la hora de formar grupos de trabajo, este sistema semipresencial no surte su efectividad como lo podría hacer un método presencial. Otra de las problemáticas que podemos encontrar es, que la falta de tiempo, la dejadez de las tareas y el simple hecho de no poder acceder todos los días a los blogs y espacios donde se cuelgan las actividades, hacen que la efectividad de la semipresencialidad se reduzca con creces.
Por otro lado, la gran ventaja de la clase semipresencial es que se puede realizar desde cualquier parte del mundo, en cualquier momento y casi en cualquier circunstancia.
Como conclusión yo estoy a favor de la clase semipresencial, pues la gran ventaja son las opciones que te da para realizar las actividades, desde casa y sin tener que desplazarse a un aula físico.
Un saludo,
Antonio Martín
2ª ENTRADA
Al igual que mi compañera Mª José, tampoco yo he cambiado mi opinión sobre la enseñanza semipresencial.
Se trata de una gran modalidad en la que muchas personas se ven altamente beneficiadas. Un claro ejemplo de esto es mi propio caso, en el que el hecho de trabajar y estudiar al mismo tiempo tiene ciertas limitaciones a la hora de tener un horario establecido para asistir a clase todos los días. Sin embargo, gracias a esta modalidad de E/A puedo adaptar mi horario de estudio a mi horario laboral y ser yo misma quien marque el ritmo de aprendizaje, siempre teniendo en cuenta las fechas para entrega de prácticas, trabajos o realización de exámenes.
Por otro lado, como también han comentado mis compañeros anteriormente, este tipo de modalidad requiere un alto grado de responsabilidad y compromiso por parte del estudiante. A pesar de que el alumno no haya de asistir a clases presenciales, ha de dedicar el mismo tiempo en casa para estudiar, siendo totalmente errónea la idea que algunas personas pueden tener respecto a que se trabaja menos en una modalidad semipresencial u online.
Asimismo, otra ventaja de este tipo de modalidad es que existe una relación personal entre profesor-alumno o alumno-alumno personal, a diferencia de la modalidad completamente online, siendo este hecho importante para que se puedan plantear dudas en clase de manera más directa o para poder presentar trabajos al resto de compañeros y que éstos también aporten su feedback, como hacemos en el desarrollo de esta asignatura.
Por todo lo expuesto anteriormente, la modalidad semipresencial me parece muy interesante, ya que favorece notablemente el desarrollo del aprendizaje autónomo del estudiante, convirtiéndose éste en aún más protagonista de su propio aprendizaje con un papel más activo e investigador.
Para finalizar, me gustaría mencionar que estoy completamente de acuerdo con lo dicho por mi compañero Antonio Camarasa “ la modalidad semipresencial no implica adquirir menos conocimientos, sino que nos obliga a adquirir incluso más al tener que investigar por nuestra cuenta a partir de los materiales ofrecidos”.
Buenos días:
Como ya dije en el comentario anterior, al principio me costó un poco, especialmente por la incertidumbre y la inseguridad que me originó enfrentarme a una modalidad totalmente desconocida para mí. Más tarde, conforme realizaba las tareas, me di cuenta de que no era tan difícil y de que podía realizar las actividades de la misma forma que en la modalidad presencial.
Ahora, tras la realización de nuevas tareas, me he sentido mucho más cómodo; siento que me voy acostumbrando cada vez más, aunque he de admitir que todavía me siento un poco inseguro cuando comienzo una actividad nueva. Como todo, es cuestión de tiempo y de acostumbrarnos a algo que hasta ahora era desconocido, pero que funciona igual de bien que cualquier otra modalidad.
César Luis Rodríguez.
2ª entrada
La opinión que tengo sobre la enseñanza semipresencial ha evolucionado favorablemente tras haber cursado un mes de la asignatura. Cada vez me parece más útil esta modalidad, puesto que estoy aprendiendo mucho más de lo que esperaba previamente.
He reflexionado acerca de la semipresencialidad y uno de los aspectos fundamentales que debemos tener en cuenta, si queremos o nos vemos en la situación de impartir una asignatura semipresencial, es la minuciosidad de los materiales. Estos deben estar perfectamente pautados para que los alumnos puedan seguirlos sin más esfuerzo del estrictamente necesario. Me ha llamado la atención lo bien detallados y ejemplificados que están los temas de la asignatura y es algo fundamental para que el aprendizaje semipresencial funcione.
Además, este fin de semana estuve en el “IX foro de profesores ELE” que tuvo lugar en Valencia y asistí a varios talleres en los que profesores de ELE nos mostraron experiencias prácticas que habían llevado a cabo a través de plataformas virtuales y la excelente aceptación que habían tenido por parte de sus alumnos.
Dicho todo esto, estoy totalmente a favor de las clases semipresenciales, ya que a través de ellas no solo se enseña español sino también autonomía y autoaprendizaje.